GELSENKIRCHEN
Seguro que a Scolari no le habrá gustado para nada ser el protagonista no buscado de las jornadas previas al enfrentamiento entre Inglaterra y Portugal. El técnico brasileño, que ha eliminado a los pross en las dos últimas competiciones oficiales que ha disputado dirigiendo a Brasil en el Mundial de Corea y a Portugal en la Eurocopa de hace dos años, ha sido objeto de la demoledora prensa sensacionalista inglesa.Quizás nerviosos por la apática andadura de los suyos, los pasquines británicos han tratado de desestabilizar a los lusos, que llevan protagonizando una trayectoria mucho más estable, aunque deberán hacer frente a las importantes bajas de Deco y Costinha.
Para hacer olvidar al barcelonista un jugador que se mueve a la perfección entre líneas y que lo mismo ataca que recupera, Scolari aplicará un considerable cambio táctico, ubicando a Figo en esa posición.
Los problemas de los portugueses no acaban ahí, pues también habrá que suplir a Costinha, el otro sancionado, aunque eso será bastante más fácil, ya que dispone de futbolistas con unas características muy parecidas, como Petit o Tiago. Junto a ello, Cristiano Ronaldo estará en el once titular, pero bastante mermado, al no poder haber entrenado a lo largo de toda la semana.
En cuanto a Inglaterra, Eriksson recupera para este partido a Gary Neville, el veterano lateral del Manchester, que puede aportar tranquilidad al conjunto. Todas las miradas se centrarán, sin embargo, en el juego de Wayne Rooney, recuperado de forma acelerada para el Mundial, pero que todavía no ha dado el nivel que se espera de él.
Beckham, que ha pasado de villano a héroe tras anotar el gol que clasificó a los ingleses ante Ecuador, ha avisado que a su equipo le gustan los «partidos físicos», con un alto ritmo de juego y en los que se suceden entradas duras.
