La población rural crece un 4,6% en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa
GASTEIZ
Los municipios rurales han puesto freno al fenómeno del despoblamiento que les afectó hace décadas, y están logrando atraer nuevos habitantes en busca de un entorno menos contaminado y de una vivienda a precio más asequible, según los datos publicados por el Gobierno de Gasteiz, que indican que la población rural ha crecido un 4,6% en Araba, Bizkaia yGipuzkoa.Los factores que han influido en este cambio demográfico son variados y las instituciones no parecen ponerse de acuerdo en atribuirle una causa. Lakua cree que el precio de la vivienda más barata que en las ciudades, y la búsqueda de un entorno paisajístico y medioambiental de más calidad son los factores que más influyen. Para la Diputación de Araba, sin embargo, la clave está en la apertura de nuevos polígonos industriales en los pueblos, la mejora de las carreteras y el nivel de servicios que ofrecen los municipios. En el caso de este herrialde que es el que más ha experimentado el crecimiento de la población en los núcleos rurales, la mayoría de los municipios con gran dinamismo poblacional son limítrofes a la capital, por lo que se puede encontrar en la localización geográfica una de las explicaciones a este comportamiento. El Departamento de Agricultura de Lakua, por su parte, explica en una de sus publicaciones que los municipios incluidos en los programas de desarrollo rural podrían haber frenado el proceso de despoblamiento gracias a las acciones emprendidas en estas áreas para conseguir una agricultura multifuncional. Sean éstas las causas u otras, el hecho es que de 1991 a 2001 la tasa de crecimiento demográfico de Araba en las zonas rurales ha sido del 14,1%. Gipuzkoa, por su parte, ha perdido población rural un 4,7% y Bizkaia se ha mantenido prácticamente estable 0,6%. El Gobierno de Lakua opina que Araba y Gipuzkoa son ejemplos opuestos en cuanto a crecimiento demográfico, y destaca que municipios guipuzcoanos como Beizama, Orendain o Errezil presentan «declive» poblacional. Aunque la distancia que los separa de Donostia no sea excesiva alrededor de 35 kilómetros, su elevada altitud y su relativo aislamiento dificultan el acceso a estos pueblos, donde no llega el transporte público.
Aumenta el número de familias
Al margen de estos ejemplos, un fenómeno generalizado que se observa en los núcleos rurales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa es el del crecimiento de los núcleos familiares, debido al incremento de parejas jóvenes, con el consiguiente aumento de la tasa de natalidad. De hecho, en el período de 1991 a 2001 la tasa de crecimiento de los núcleos familiares fue del 7,8 %, y el número de familias nuevas que se generaron fue de 1.471, alcanzando en 2001 la cifra de 20.208.
|
