GASTEIZ
El Festival de Jazz de Gasteiz homenajeó ayer a la cuna del jazz, la ciudad de Nueva Orleans, con un concierto especial al aire libre en las campas de Armentia donde los músicos de esta ciudad demostraron su alegría por tocar y entretener al público. En su 30 cumpleaños, los organizadores de este certamen han querido mostrar su apoyo a una ciudad que en agosto del año pasado perdió a 1.400 de sus habitantes tras el paso de un huracán, apodado "Katrina". Por la capital alavesa han desfilado grandes músicos de jazz de Nueva Orleans desde los comienzos de este Festival y Gasteiz ha querido mostrar su cariño por esta ciudad al sur de Estados Unidos con una tarde-noche muy especial dedicada a los músicos y a los habitantes de la capital del jazz.
Sobre la alfombra verde de las campas de Armentia se dieron cita esta tarde cientos de personas que disfrutaron del espectáculo cómodamente sentados sobre el césped, la mayoría, o bailando sin desmayo, los más pequeños. Por el escenario fueron desfilando tres grupos de Nueva Orleans con tres estilos diferentes pero con algo en común: la alegría por tocar.
La tarde musical se abrió con los Dukes of Dixieland, un sexteto que ofreció un repertorio de sonidos alegres y reconocibles para el público como “What a wonderful world”. El segundo invitado de esta tarde fue Michael White, un músico polifacético que compone sus propias melodías y que saca tiempo para enseñar música, afroamericana, en una universidad de Estados Unidos. Acompañado de dos grandes veteranos, Gregory Stafford (trompeta) y Detroit Brooks (banjo), así como del joven Roland Guerin (contrabajo), calentó el ambiente del Festival.
El colofón de la noche lo pusieron los componentes del grupo The Spirit of Nueva Orleans, compuesto por seis músicos que se unieron después del desastre provocado por el huracán “Katrina” y liderado por el joven trompetista Mark Braud.
