Desde que accedió ya hace siete años al poder local, una de las obsesiones del PP gasteiztarra ha sido la de dejar bien claro que Gasteiz es una ciudad española más. Se acabó aquello de que las capitales de la CAV, bajo control nacionalista, parecieran algo diferente a las demás capitales de provincia españolas. Y, así, a los reyes españoles ­o a su hijo y nuera­ se les invita a todo lo que se pueda, los mayores bodrios musicales/televisivos han tenido carta de naturaleza en el Buesa Arena o en Mendizorrotza, espectáculos denigrantes se han paseado por nuestras calles, las jornadas de la FEMP se han celebrado en Gasteiz, el documento que reivindica para todas las capitales de provincia y municipios españoles en general mayores competencias y capacidades se denomina Carta de Vitoria; por aquí hicieron sus pinitos los de la patrulla Aguila; seremos la única capital de provincia que está haciendo una plaza de toros nueva... En fin.

Lo que ya resulta demencial es que, en esa desenfrenada carrera por traer a Gasteiz lo más chabacano y español, nos anuncien un desfile de moros y cristianos dentro del programa festivo. ¿Cuál es el valor cultural de este desfile que, visto en TV, a la mayoría nos parece fuera de sitio, además de rancio? ¿Qué expresa dicho desfile? ¿La victoria de la cristiandad sobre el infiel? ¿La reconquista de España, el triunfo de los Reyes Católicos? ¿Cómo ayudan este tipo de celebraciones de dudoso ­nulo­ valor histórico o cultural a la ya de por sí problemática integración de las comunidades musulmanas/árabes instaladas en Gasteiz? ¿A quién se le ha ocurrido esta majadería? ¿A Encina, al alcalde? ¿A nadie del Departamento de Cultura se le han puesto los pelos de punta? ¿Nadie ha dicho ni mu? ¿Dónde están los prohombres vitorianos, prebostes de la cultura que se dejan entrevistar para pontificar sobre cualquier cosa?

Cómo vamos, amigas, cómo vamos.

Ainara Ruiz de Mendarozketa Martinez del Campo