Después de haber conseguido la txapela del
manomanista de este año, Juan Martínez de Irujo, se tomó unos días de descanso.
El pelotari de Ibero resalta que ha sido el duro y constante trabajo lo que le
ha aupado a lo más alto de la élite de la pelota. Ahora, ha vuelto con las
mismas ganas y fuerza que le han llevado a ser uno de los pelotaris más en forma
de la presente edición.
Me imagino que se le habrá pasado la «resaca» tras haber conseguido la txapela del manomanista. Ahora, pensándolo en frío, ¿cómo recuerda esa final?
Es un buen recuerdo y es verdad que pensándolo ahora fríamente, es la txapela que más ilusión me ha hecho de todas las que he cosechado. Haberla logrado, después de no haberla conseguido el año anterior, fue muy bonito.Desde la televisión se le veía muy
tranquilo, pero ¿la procesión iba por dentro? ¿Estaba nervioso?
Claro que estaba nervioso. Siempre hay tensión porque una final no se juega todos los días y lo que te juegas en un partido de este tipo es muy grande. Se puede tener miedo a no ganar la txapela, a perder, pero la verdad es que nervios, en mi opinión, tiene todo el mundo.
A sus 24 años tiene un palmarés que muchos
envidian. ¿Cuál es su secreto para afrontar cada partido?
Sobre todo, ir con las ideas claras al frontón. Hay que procurar pasárselo bien. Por otro lado, hay que entrenar mucho y bien durante toda la semana y procurar ser constante con la pelota.
¿Tiene usted alguna manía?
Creo que no. Me suelo poner los tacos de la mano derecha al principio y después los de la izquierda. Pero no lo considero manía.
Las finales contra Olaizola II se han
vuelto un clásico. ¿Cómo le definiría?
Aimar es un pelotari muy completo. Tiene buenas manos, buenas piernas y buena cabeza. Yo creo que tiene todo para estar ahí arriba.
¿Cómo se le presenta el verano? ¿Va a coger
vacaciones o tiene intenciones de jugar?
Después de la final ya estuve de vacaciones. La verdad es que ahora en verano son fiestas en diferentes pueblos y apenas tenemos vacaciones. Por lo tanto, estaremos preparados para jugar en cuanto haga falta.
Con los demás pelotaris, ¿qué relación
tiene? Me imagino que con algunos se llevará mejor que con otros...
Con todos me llevo bien y con otros mejor todavía. La pelota es uno de los pocos deportes en que todos nos llevamos bien. Ya puedes jugar contra quien sea que estás en el mismo vestuario, que te cambias junto a él y te pones los tacos con él. Claro está que dentro de la cancha existe rivalidad, pero es un deporte muy sano y dentro de los vestuarios hay muy buen rollo.
¿Y se puede saber con quién mantiene mejor
relación?
Pues, tengo que decir que está el grupo del «veranito». Sobre todo, me llevo muy bien con Eulate. Es uno de los pelotaris con los que mejor me llevo. Por otra parte, con Fernando Goñi, Lasa, Eugi, Chafée y Etxaniz también tengo una buena relación. En definitiva, con los que entrenas a diario tienes más confianza.
¿Cuál suele ser su método de entrenamiento?
Tenemos un preparador físico y él nos lleva todo el plan de entrenamiento. Nos manda, más o menos, lo que tenemos que hacer cada día o en cada sesión de entrenamiento. Yo creo que hemos acertado.
Respecto a la comida, ¿suele tenerla en
cuenta, por ejemplo, el día que tiene que jugar un partido?
Normalmente, cuando los partidos son a la noche, suelo comer pasta y un poco de carne, y antes del partido, también. La pasta es un alimento muy bueno para practicar deporte y la veo importante para mantenerme bien en el partido.
Tengo entendido que está en un euskaltegi
aprendiendo euskara. ¿Qué tal van esas clases? ¿Suele practicar con sus amigos y
amigas o con alguien en especial?
A la hora de hablar, suelo tener miedo a «meter la gamba». El mayor problema que tengo es que no rompo a hablar, pero, por lo demás, ahí solemos ir, y la verdad es que hay un ambiente muy bueno en AEK.
¿Es verdad que la fama ayuda a la hora de
ligar?
Bueno, no lo sé. Yo, por ejemplo, tengo novia y no suelo ligar mucho. Conoces a más gente y la gente te conoce más. Igual en ese sentido sí que se puede ligar más.
Me imagino que la gente se le acercará al
reconocerle.
Sí y no. Se acercan más tíos que tías, pero como tengo novia, no suelo ligar nada.
Por último, ¿qué les diría a esas personas
que le animan tanto en cada partido y, sobre todo, en cada final?
Siempre les digo que ellos tienen gran culpa de mis
triunfos. Les estoy muy agradecido. Me gustaría decirles que sigan así y que
sepan que parte de las txapelas conseguidas son suyas. -