GASTEIZ
Todos los grupos del Parlamento de Gasteiz coincidieron ayer en acusar al PP de pretender «obstaculizar» el proceso abierto en Euskal Herria, tras el debate introducido por éste en relación a la kale borroka.
El portavoz del PSE, José Antonio Pastor, pidió a ese partido «que no ponga obstáculos al proceso de paz y se sume a él». Pastor afirmó que el proceso «sigue su curso» y mostró su convicción de que «va a salir bien». Y aunque no fuera así, añadió, «el Gobierno español tiene el derecho y también la obligación de intentarlo».
José Antonio Rubalkaba (PNV) coincidió con Pastor a la hora de acusar al PP de estar «en contra de todo el proceso». El parlamentario de EA Unai Ziarreta sostuvo que el PP «quiere seguir ligando unas pretensiones políticas con los fines de ETA para no entrar a debatir la autodeterminación y la independencia».
Tanto el electo de EB Antton Karrera como Aintzane Ezenarro, de Aralar, coincidieron en acusar al PP de pretender obstaculizar el proceso. Ezker Abertzalea, por su parte, no intervino.
Esta imputación unánime tuvo lugar ante una iniciativa del PP de condena de los actos de kale borroka. El texto fue enmendado por el PSE, por un lado, y por el tripartito y Aralar, por otro. Este último fue el aprobado; en él, se condenan «todas las expresiones de violencia» y se reafirma «la apuesta por el diálogo y el acuerdo».
La polémica por la actitud del PP se produjo también en otro punto del día, cuando Ibarretxe le acusó de hacer de los obstáculos al proceso «deporte nacional».