IRUÑEA
Tras una pancarta con el lema «contra los abusos policiales. A favor de una barrio vivo y popular», un centenar de vecinos de Arrosadia se concentraron a última hora de la tarde de ayer para reclamar «una convivencia normalizada». La protesta responde al clima creado en el barrio como consecuencia de lo que calificaron como una «agobiante presencia policial» y «una serie de episodios que atentan contra las libertades públicas y que van en contra de una convivencia normalizada».
Representantes de los vecinos destacaron que los problemas comenzaron con la organización de los actos en torno a Olentzero, ante los que además de tener que abonar una fianza tuvieron que soportar la presencia policial.
Otras actividades han corrido igual suerte, ya que según denuncian, trabas municipales al margen, las fiestas del barrio han sido objeto de numerosos expedientes y como consecuencia de los mismos, «por organizar unas fiestas populares y participativas» los vecinos se enfrentan a la amenaza de sanciones económicas.
Las proyecciones de cine de verano, a cargo de la Gazte Asanblada, también han sido objeto de intervención policial, en este caso de la Policía Municipal, que identificó a los responsables y amenazó con nuevas multas.
Para resaltar la gravedad de la situación que viven, los residentes explican que tanto la Policía española como la Policía Municipal han llegado a hacer acto de presencia en una txistorrada popular y han llegado a intervenir en establecimientos hosteleros, en los que según su testimonio, además de practicar registros a personas, han proferido amenazas e incluso han arrancado carteles anunciadores. Tal es el hartazgo que avanzaron que los mismos profesionales de la hostelería tiene previsto realizar gestiones ante las autoridades para acabar con esta situación.