DONOSTIA
El Palacio Miramar de Donostia acogió ayer la quinta edición de las Jornadas sobre Noviolencia Activa, organizadas por Bidea Helburu. Las víctimas de la violencia en diferentes partes fueron el eje central de esta jornadas en las que se pudieron escuchar testimonios íntimos y emotivos. Jo Berry y Pat Magee viajaron desde Inglaterra y el Norte de Irlanda para relatar su experiencia y su esfuerzo por escucharse y entenderse mutuamente. Ambos relataron el camino que han recorrido para «hacerse amigo del enemigo» y del que se da cuenta en la entrevista conjunta de la página anterior.
Por su parte, la psicoterapeuta Victoria Mendoza, natural de México pero residente en Euskal Herria, recordó la dureza de su detención y de las torturas que sufrió en México. Fue arrestada juntoa sus tres hermanos. Ella y su hermana fueron violadas e, incluso, una de ellas quedó embarazada. El sufrimiento no acabó ahí, porque también conoció el maltrato de manos de su pareja y «una tercera violencia como inmigrante».
Mendoza subrayó que «el dolor no tiene ni color ni país». Explicó que una persona que ha pasado por una situación de esas características primero debe enfrentarse a la «lucha por la negación» de lo vivido. Después, esa negación se convierte en rabia y, posteriormente, en dolor, «del que debemos extraer claridad de ideas». En la mesa redonda también intervinieron familiares de víctimas del 11-M. Todos se enfrentaron a las preguntas de «qué me ha pasado, cómo he madurado y por qué considero que ha pasado».
«No estamos aquí para dar consejos sinopara escucharnoslos
unos a los otros y saber manejar la herencia del pasado», sostuvo el moderador,
Juan Gutiérrez.
Impulsan un foro
Los organizadores aprovecharon el contexto de estas jornadas para presentar el foro de debate que quieren impulsar sobre ciudadanía, movimientos sociales y procesos de paz.«Bidea Helburu está formado por personas que venimos de diversos movimientos populares y sociales y sentimos cierta simpatía por el antimilitarismo, la desobediencia, la ocupación... al tiempo que estamos en contra de la criminalización», explicó uno de sus integrantes. Entre los proyectos que barajan para este año está dinamizar la página web y poner en marcha un espacio de reflexión sobre el proceso.
«Estamos motivados por la nueva situación que se ha abierto y consideramos que hay mejores condiciones que en ocasiones anteriores. Pero también tenemos una postura crítica porque el proceso se está realizando entre políticos profesionales y en secreto. Todos los ciudadanos deberíamos participar», manifestó.
Por ello, emplazó a los movimientos sociales y a cada individuo a iniciar un diálogo con el objetivo de «abordar el conflicto vasco y crear alianzas entre los de abajo». Bidea Helburu plantea cuatro grandes cuestiones: la desobediencia civil y la violencia no activa, el significado de respeto de la voluntad popular, en qué consiste la desmilitarización y el modelo de seguridad, y el papel que deben jugar los movimientos populares.
Bidea Helburu invitó a los participantes en estas jornadas a que piensen sobre estas preguntas y envíen sus aportaciones a la página web, donde se colgarán. En principio, el plazo de envío será hasta el 2 de diciembre. Con todas las aportaciones elaboraránun guión que servirá de base para una posterior reunión.
A.L.
DONOSTIA Patricia Adams, del Global Call For Non-Violent Resistance, explicó la labor activista que están desempeñando en Estados Unidos contra la guerra y la ocupación de Irak. Actualmente, está trabajando a tiempo completo en la campaña nacional «Declaración por la Paz», que consiste en «acciones directas, creativas y no violentas». Se mostró a favor de ayudar económicamente a los iraquíes en la construcción del país, pero sin la intervención estadounidense. «Necesitan atención, no multinacionales», resaltó. Valoró de forma positiva el resultado de esta campaña, que ha logrado el apoyo de 500 organizaciones de Estados Unidos.
