IRUÑEA
Las autoridades francesas excarcelaron ayer a la presa navarra Beltzane Obanos apenas unas horas después del fallecimiento de su padre en Iruñea. Estaba a punto de cumplir cuatro años en prisión preventiva en Fleury.El padre de Beltzane Obanos murió de forma repentina el domingo en Hiriberri-Arakil (será incinerado hoy a las 8.45 en el cementerio de Iruñea). La prisionera tenía ayer que afrontar un interrogatorio rutinario ante la juez de París Laurence Le Vert, según explicaron a GARA sus abogados, y en ese momento se puso sobre la mesa que ya existía una petición de puesta en libertad debido a su prolongado encarcelamiento, que debía resolverse en diciembre. El hecho luctuoso sobrevenido provocó que la decisión favorable se adelantara.
Beltzane Obanos está a punto de cumplir cuatro años en prisión preventiva;fue detenida en el mes de diciembre de 2002, cuando tenía 23 años, junto a Ibon Fernández Iradi y otros ciudadanos vascos, en una amplia redada iniciada en Arcachon, Pau, Tarbes y Lourdes y continuada en Euskal Herria. Es hija de Gotzone Sainz de Murieta, conocida por haber ejercido como portavoz de Sortzen-Ikasbatuaz.
En el primer momento, las autoridades españolas la identificaron como Ainhoa García Montero. Al día siguiente admitieron que se trataba realmente de Beltzane Obanos, y trataron de culpar de ello a un mero error en la «identificación visual».
En febrero de 2004, Obanos participó en la huelga de hambre realizada por las prisioneras de Fresnes, con el lema «Bakartasuna eta isolamenduari stop» y en la que también tomaron parte Joana Núñez, Kristina Goirizelaia y Garazi Aldana. Cuatro meses después, tres fueron juzgadas bajo la acusación de agredir a una presa social. A Obanos se le impuso un parte de castigo de un mes de duración, aunque Askatasuna remarcó que durante la vista había quedado claro que las provocaciones procedían de la otra parte.
Por los derechos de los presos, anoche se concentraron 23 personas en Berango, 20 en Zaldibia, 11 en Euba, 14 en Añorga, 22 en Altza, 16 en Ataun, 55 en Iurreta, 21 en Otxarkoaga, 40 en Laudio, otras 40 en Rekalde y 16 en Sopela. En esta última localidad, el pasado domingo, 250 vecinos dieron la bienvenida al ex prisionero político José Ramón Tokero.