¿Tienen reflejos las urnas? Si nos encaminamos hacia el voto electrónico, ¿a qué tópico nos agarraremos los plumillas para rellenar nuestras plataformas de opinión? Insisten demasiado en convencernos de que las votaciones en los EEUU nos conciernen, y que se está produciendo un cambio porque llegan los llamados demócratas al poder legislativo en Congreso y Senado. ¿Cuál es la diferencia en materia económica o de política internacional entre un demócrata y un republicano? No me contestes hasta después de la consulta al diccionario.

En Nicaragua aparece de nuevo Daniel Ortega y lo hace con unas siglas que fueron míticas, mitificadas, deplorablemente maltratadas por algunos de sus componentes jerárquicos y que ahora resucitan en duplicado ejemplar. Han ganado los de Ortega, es decir una versión confusa de ejercicio del poder. Y nadie recuerda ni su pasado como gobernante, ni personal, ni sus alianzas extrañas de los últimos tiempos. Nos conformamos cada vez con menos. Me da la impresión de que nos vamos convirtiendo en anticlericales, cuando nos decíamos ateos. Quitaremos a Bush de los telediarios, pero el sistema imperante con tantas desigualdades y desequilibrios entre ricos y pobres sigue intacto. Nadie cuestiona las ideas, simplemente se hacen bucles formalistas sobre sus signos externos. Vamos siempre a la reducción más económica de los argumentos. Vivimos a base de eslóganes publicitarios. Y nos creemos que existen el dinero, las hipotecas y el espíritu santo.

Lo único que realmente existe en televisión es el sistema de pesas y medidas de audiencias de Sofres, y le están pidiendo que se ajuste a la realidad. Verdaderamente el consumo televisivo se está fragmentando, hay nuevos formatos, soportes que no se contabilizan pero que crecen estadísticamente. Estamos en esa época del año en donde las novedades electrónicas se hacen visibles, cuando te das cuenta que el aparato que ayer era de última generación hoy es un vetusto artilugio. Por eso reflejan las urnas resultados y cambios de peinados. Dentro de poco votaremos desde el móvil. Este aparato va a convertirse en el eje de nuestras vidas, hasta podremos ver la tele en él. -