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Las coordinadoras delegan la gestión de los Olentzeros
·Denuncian las trabas y la «cerrazón» del Consistorio de Iruñea y convocan protestas
Representantes de nueve coordinadoras culturales de los barrios de Iruñea se reunieron el día 20 con una delegación del Ayuntamiento para intentar lograr un acuerdo sobre los Olentzeros. Ante la «cerrazón» del Consistorio, han decidido que sean lo vecinos quienes los organicen.
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IRUÑEA
Al igual que hicieran en las Navidades de 2005, las coordinadoras culturales de los barrios iruindarras de Arrosadia, Etxabakoitz, Iturrama, Donibane, Sanduzelai, Mendillorri, Alde Zaharra, Errotxapea y Txantrea, se han negado a organizar los Olentzeros de sus respectivos barrios debido a la actitud que viene manteniendo el Ayuntamiento de la capital navarra durante los últimos años. Recordaron al respecto que a pesar de los más de veinte años en los que vienen organizando esta tradición en sus respectivos ámbitos, «los únicos problemas destacables habidos han estado relacionados con el tráfico». Sin embargo, añadieron que «en los últimos años una normativa creada al uso por el Ayuntamiento ha trastocado tanto la celebración del Olentzero como la Cabalgata de reyes». Entre las trabas que el equipo de gobierno municipal pone a las coordinadoras culturales de los barrios de Iruñea citan la imposición de una fianza de 1.000 euros, respecto a la que, aseguran, «no nos dan ninguna garantía de dónde empieza y dónde acaba la línea para que se queden sin la misma». Añaden que el Consistorio «insinúa que debemos hacernos responsables de lo que ocurre ese día en el barrio y que tenemos que ejercer un control sobre las cientos de personas que participan», algo que, en palabras de los miembros de las coordinadoras, «al propio Ayuntamiento, con un mayor despliegue de medios, le resulta difícil».
Reunión con el Consistorio
El pasado 20 de noviembre representantes de estos colectivos se reunieron con miembros del Consistorio, pero ante al «continuar a misma cerrazón» que en años anteriores, han optado por dejar nuevamente la organización de los Olentzeros en manos de la propia vecindad.
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