IRUÑEA
La gran novedad de la expedición antoniana que asaltará la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones en la pista del RK Kozina será la presencia de Ratko Nikolic ocupando el pivote ofensivo, toda vez que el serbio ya se ha recuperado de su lesión en el tobillo izquierdo.
La vuelta de Nikolic, que ha estado más de un mes en el dique seco, supliendo su ausencia tanto Juancho Pérez como Dominikovic en tareas ofensivas, ha traído consigo que el técnico del conjunto albiazul, Zupo Ekisoain, se haya visto obligado a realizar un descarte, siendo Andorinho el elegido esta vez.
Henchidos de moral tras las últimas victorias ante el Barcelona y Altea, el principal enemigo de los antonianos serán ellos mismos si se confían ante la diferencia de nivel que se presupone entre ambos conjuntos. Eso y la pista de Koper, un pabellón para 3.000 aficionados que estará a rebosar y no dejarán de animar a su equipo.
El RK Kozina debuta en la Liga de Campeones y se clasificó como segundo en el grupo G, en el que los azulgranas terminaron líderes con seis puntos más que los eslovenos, si bien pasaron serios apuros en el citado pabellón.
«El Kozina es un equipo que, sea cual sea el resultado, pelea los sesenta minutos y no baja los brazos. De hecho, ante el Barcelona fueron perdiendo de siete y, a base de pelea, consiguieron reducir la diferencia a un solo gol, espoleados por su público, aunque luego acabaron perdiendo de tres», advirtió Ekisoain.
Es por ello que el preparador navarro ha preparado a sus pupilos para que no bajen la guardia ante una escuadra inédita y, en principio, inferior en cuanto a calidad de sus jugadores.
«Puede parecer un rival fácil, pero fuera de casa en Europa no te puedes fiar. Si ha llegado a octavos es por méritos propios y nuestro objetivo es hacer un buen partido, pelear el resultado y ganar para después rematar la eliminatoria en Pamplona», advirtió Ekisoain.
El míster albiazul insistió en que «va a ser difícil seguro. Ya veremos si hay permisividad por parte de los árbitros y trataremos de adaptarnos lo mejor posible y jugar con tranquilidad para ganar, si puede ser por una diferencia amplia».