«Voy a hacerle una confidencia». Con estas palabras comenzó a responder este domingo Michèle Alliot-Marie a la pregunta de la presentadora del informativo vespertino de la Plus francesa sobre cuándo anunciará la ministra de Defensa su candidatura a la candidatura de la UMP para las presidenciales del 2007. Cualquiera que conozca mínimamente a la ex alcaldesa de Donibane Lohizune hubiera podido adivinar cómo acabaría esa promesa de revelación: «Cada vez tendrá usted que esperar menos para tener la respuesta» dijo. Porque nuestra querida MAM es así, un golpe de frescura.
Cualquiera que haya seguido un poco a esta señora sabrá que no deshojará la margarita hasta el último momento. Y todo por un principio de precaución que MAMlleva hasta el extremo: «no hablo de aquello que no conozco» aunque lo conozca, lo cual coloquialmente significa «no me mojo en nada por si acaso deja mancha». Y entrar en la batalla por la candidatura de la derecha francesa teniendo al omnipresente Nicolas Sarkozy enfrente puede dejar un enorme lamparón. Pero abandonar la guerra antes de que empiece sería signo de debilidad, algo que esta mujer que sueña con ser algún día presidenta de la República no puede permitirse. Por eso, MAM estira tanto su respuesta. Por eso participó este sábado en ese pseudo-debate contra-programado por la UMP como respuesta al eco mediático obtenido por las primarias socialistas y por la que es a la postre regia candidata del PS.
¿Quieren una confidencia? MAM no se presentará. Tiene mucho que perder y nada que ganar. Porque Nicolas Sarkozy es mucho Nicolas Sarkozy. El miércoles pasado en una comida en off con periodistas de los pricipales medios del país el ministro de Interior ya mostró lo preocupado que está por la posible candidatura de MAM: nada. «La suerte está echada», dijo el que ya se cree presidente de la República.
Por cierto, el periodista de I>télé< /EM> que colgó la crónica de esa comida en su blog privado tuvo que retirarla a instancias de sus jefes. Casualmente, el pseudo-debate entre Sarkozy y Alliot-Marie giró en torno a la libertad. ¿Quieren una confidencia? Sarkozy es en efecto mucho Sarkozy, pero hay quien le tiene respeto a la libertad y ha colgado la crónica en su web. Ahora el prepotente Sarkozy es menos persona. Quizá también menos candidato. Aunque sigue siendo demasiado para MAM. -