GaraAzkenak - Paperezkoa - English Edition  |  Le Journal
EUS | ES | FR | ENG
 » PAPEREZKOA
  -Aurkibidea
  - EuskalHerria
- Jendartea
- Ekonomia
- Iritzia
- Mundua
- Kultura
- Kirolak
 » AZKENORDUA
 » ENGLISH EDITION
 » DOSIERRAK
 » DOKUMENTUAK
 » IRUDITAN
 » HEMEROTEKA
 » Produktuak
Gara > Idatzia > Iritzia > De reojo 2006-12-12
Se fue

Augusto Pinochet es velado con honores militares. El gran traidor, corrupto y asesino recibe salvas militares porque sus correligionarios entienden que su labor de exterminio fue una hazaña militar. Fue un vulgar asesino, torturador y ladrón de los bienes patrimoniales del pueblo chileno. Es lo habitual en estos seres indignos. Pero mueren en hospitales, sin conocer la cárcel, y reciben honores. Desde que se conoció el avance informativo son muchos quienes se rasgan las vestiduras, quienes se ponen campanudos y hablan del gran dictador, del gran asesino, pero son los mismos que miran hacia otro lado cuando se trata de hablar de Francisco Franco Bahamonde, sus cómplices y sus herederos.

La Ley de la memoria es un insulto a la memoria y a la verdad. Como alguien ha dicho es una ley de punto y final. Una manera de olvidar, de tirar tierra por encima de los muertos que defendieron la República y la legalidad vigente. Siempre pasa lo mismo, se es muy solidario o muy firme con lo lejano, pero ante lo cercano tiemblan las piernas y se buscan excusas. O componendas o se hacen transiciones que después van dejando cicatrices sin cerrar que supuran por décadas.

Lo cierto es que se vive en una contradicción: ha muerto un asesino dictador, uno de los mayores criminales de Latinoamérica del siglo XX, pero lo ha hecho sin recibir ningún tipo de castigo por sus muchos crímenes, multimillonario en sangre y dólares. Hay algo importante, aquel 11 de setiembre vimos los bombardeos de la Casa de la Moneda por televisión, supimos del desenlace del presidente electo Salvador Allende. Fue, en ese sentido, un golpe de estado televisado. Aquellas imágenes forman parte de la infamia del siglo XX. Y desde entonces la figura del traidor, del general felón, ha sido una constante televisiva, asistiendo a funerales de otros dictadores.

Se acaba de pasar una página de la historia contemporánea. Volveremos a Santiago a pasear sabiendo que al menos el gran asesino está criando malvas. Lo otro vendrá con el tiempo. Y recordemos que fueron los norteamericanos quienes ayudaron al asesino con dinero y armamento. Como siempre. -


 
Inprimatu
...Albiste gehiago
Mundua
El genocida no recibirá funerales de Estado y sólo será despedido con honores militares
Kirolak
«Sin compromisos, no hay apoyo»
Mundua
La UE congela parcialmente la adhesión turca
Euskal Herria
Campusetara ere heldu da presoen aldeko ekimena
Jendartea
Unicef constata que la igualdad de género es prioritaria para el progreso humano
  CopyrightGara | Kontaktua | Norgara | Publizitatea |  rss