GASTEIZ
El juzgado de lo Penal número 1 de Gasteiz inició ayer el juicio contra la directora y dos antiguas trabajadoras de la guardería “Primeros Pasos” de Gasteiz, acusadas de maltratar a menores de 0 a 3 años que asistían al citado centro entre los años 2001 y 2003. Al juicio, que finalizará hoy, están llamados a declarar unos cuarenta testigos, entre ellos padres y madres de los niños que asistían entonces a la guardería y ex empleadas.
El fiscal y los abogados que representan a los padres y a la asociación Clara Campoamor piden para las tres acusadas tres años de cárcel por presuntos delitos de malos tratos a niños y otros tres de inhabilitación para desempeñar empleos de custodia de guarda de menores, mientras que los letrados defensores solicitan la absolución por falta de pruebas.
Las investigaciones comenzaron a finales de 2003 cuando un grupo de padres comunicó a la Fiscalía de Menores de Gasteiz sus sospechas de que personal de la guardería podría estar maltratando a sus hijos, ya que algunos bebés se autogolpeaban en la boca cuando sus familias les apuraban en sus domicilios para terminar la comida.
Según la fiscalía, una de las cuidadoras, que se encontraba de baja laboral y que luego fue despedida, dijo a los padres que en la guardería «se gritaba, pegaba y amenazaba a los menores de forma sistemática». Esta trabajadora detalló asimismo desagradables prácticas de maltrato que, según ella, se llevaban a cabo en el centro.
La guardería sigue hoy abierta y al frente de ella continúa la misma directora, mientras que las otras dos acusadas ya no trabajan en esta guardería.
La directora, a preguntas de la fiscal, negó todas las acusaciones vertidas por la ex empleada de su centro y aseguró que nunca vio a las empleadas maltratar a los niños. Reconoció asimismo que en 2003 comenzaron los problemas laborales con una de las empleadas, la persona que trasladó a los padres las acusaciones de maltrato, que se cogió la baja el 8 de octubre de ese año y fue despedida al finalizar el mismo.
Asimismo, preguntada por su abogada defensora, insistió en que desde que se abrió el centro en 1996 «jamás» ha recibido quejas de los padres ni de las más de cincuenta empleadas y alumnas en prácticas que han pasado por el centro.
El juicio terminará hoy con la declaración de los testigos, entre ellos la ex empleada que acusó a las imputadas de maltratar a los menores.