Hay un refrán castellano que, de cuando en cuando, conviene recordar. Reza el adaggio:«Dime de qué presumes y te diré de qué careces». Y hoy nos vale de lente para leer, por ejemplo, el editorial de “Diario de Noticias”, “Noticias de Gipuzkoa” y “Noticias de Alava”.

Ayer todo el mundo daba por buena la existencia de una reunión entre ETA y el Gobierno español y el editorialista del Grupo Noticias alababa su propio criterio «respecto a las filtraciones, especulaciones, rumores e invenciones que desde medios de amplia difusión se están prodigando sobre el proceso de paz. Desde este mismo espacio se ha insistido en la importancia de la discreción para que la tarea de quienes están implicados en este empeño llegue a buen fin». Y después de tamaño ejercicio de autoestima, se referían a la tan traída y llevada reunión:«Sería interesante conocer desde dónde y por qué se filtró ese dato a varios medios, y no sería demasiado errar si la mirada se dirige a ámbitos gubernamentales». Y después de pedir y exigir discreción a chorros, se lanzaba a la piscina:«puestos a dar luz sobre el estado de las cosas, mejor decir la verdad que despistar con ambigüedades a una ciudadanía deseosa de calmar su ansiedad por lograr la paz». Qué intriga, ¿verdad? Nos lo explica así:«Y la verdad es que el Gobierno y ETA no celebraron ninguna reunión oficial la semana pasada. Quienes sí se reunieron, como lo vienen haciendo habitualmente con exquisita discreción, generosidad y responsabilidad, fueron las personas que desempeñan la labor de intermediarios en este proceso». O sea, el más enterado es él. Si él lo dice...

Insiste, además, en la calidad de su revelación:«Los encuentros de la semana pasada no son la reunión que los oráculos mediáticos han querido desvelar, sino el trabajo discreto de los intermediarios que alguien ha querido sacar a la luz para su beneficio partidario. De todo esto se deduce que el proceso, dentro de su gran complejidad y su evidente dificultad, no iba tan mal como se anunciaba antes de las reuniones de la semana pasada, ni ahora ha dado un vuelco positivo por el hecho habitual y normal de haberse reunido los intermediarios». Yo no cuento con información privilegiada, pero anoto lo escrito para comprobarlo luego, a la luz de lo que se sepa en un futuro. Y no duden de que más de un editorialista, ufano de haberse conocido y mejor pagado de sí mismo que un torero, hará votos para que nadie relea lo que escribió. - msoroa@gara.net