Saddam Hussein será ahorcado «en cualquier momento en los próximos 30 días»
·el tribunal de apelacion anuncia que nada, ni los procesos hoy en curso, detendra la ejecucion de la sentencia
Las autoridades colaboracionistas tienen prisa por ahorcar al depuesto presidente iraquí, Saddam Hussein. Será ejecutado «en cualquier momento en los próximos 30 días». Tampoco la apelación a los procesos en curso suspenderá el ahorcamiento. Se cumple así el guión y Washington respirará tranquilo: su complicidad activa con el Saddam que masacró a los kurdos será enterrada junto al líder del Baath «en un lugar secreto».
BAGDAD
La Corte de Apelación del Irak ocupado confirmó ayer la condena a muerte contra el derrocado presidente iraquí, Saddam Hussein, por la muerte de 148 chiítas en la década de los años ochenta, y anunció que la sentencia por ahorcamiento será ejecutada en 30 días.
El presidente de la Corte de Apelación del Alto Tribunal Penal, Arif Shaheen, aseguró que Saddam Hussein «será ejecutado en los próximos 30 días y en cualquier momento» a partir del miércoles (por hoy).
El reo fue condenado a muerte por ahorcamiento el pasado 5 de noviembre, acusado de la muerte de 148 chiítas en la aldea de Dujail, 60 kilómetros al norte de Bagdad, tras un ataque contra el convoy presidencial realizado por milicianos de Al-Dawa el 8 de julio de 1982.
En respuesta a este magnicidio frustrado, y a tenor de la sentencia del alto tribunal, el Gobierno iraquí inició una campaña de represión que incluyó la destrucción de casas y propiedades de aldeanos, el exilio interior de muchos de ellos y el encarcelamiento de 600 en una prisión de los servicios secretos iraquíes, 148 de los cuales siguen desaparecidos.
La Corte de Apelación confirmó ayer la pena de muerte por ahorcamiento contra el hermanastro de Saddam, Barzan al-Tikriti, por aquel tiempo jefe de los servicios secretos, y contra el entonces presidente del Tribunal Revolucionario de Irak, Awad al-Bandar. Asimismo, aceptó la apelación contra la sentencia que condenó al vicepresidente iraquí, Taha Yasin Ramadan, a cadena perpetua, y pidió endurecer la condena.
La Corte de Apelación insistió en que los actuales procesos en curso contra la cúpula del Baath iraquí no tiene carácter suspensivo y que Saddam será ahorcado en treinta días pese a que está siendo juzgado junto a otros seis acusados por dirigir la operación Anfal contra los kurdos entre los años 1987-88, y en la que murieron 180.000 personas, según la acusación.
Un portavoz de este tribunal, Aref Shahin, insistió a su vez que la legislación instaurada por los ocupantes garantiza que Saddam será igualmente ejecutado incluso en el caso de que el presidente, el kurdo Yalal Talabani y los dos vicepresidentes se negaran a ratificar la condena. Frente a las críticas de la población kurda, que exige que Saddam sea previamente juzgado por la operación Anfal, todo apunta a que Talabani delegará en alguno de los vicepresidentes la firma de la condena.
El presidente de la Corte de pelación confirmó que los condenados a muerte verán anuladas las otras acusaciones que pesan sobre ellos.
El periódico oficialista iraquí “Al Sabah” aseguró que el presidente iraquí será ahorcado y enterrado en un lugar secreto.
Saddam Hussein desafió al tribunal que lo condenó y con un corán en la mano, deseó «larga vida a Irak» y recordó que «Dios es más grande que los ocupantes». Exigió, eso sí, varias veces al tribunal, morir a manos de un pelotón de fusilamiento, y no en la horca «como los criminales».
Uno de sus abogados, Jalil Duleimi, calificó el fallo de «previsible en un proceso político al 100% (...) La decisión de la Corte emana de un hombre, Muaffak al Rubaie (consejero de Seguridad Nacional)», denunció el letrado.
Formaciones sunitas denunciaron el fallo como «una ofensa al pueblo iraquí» y lanzaron un SOS al mundo árabe.
Nuri al-Maliki, primer ministro y paradójicamente líder de Al-Dawa, anunció la ejecución antes de que acabe el año.
Más soldados muertos en Irak que víctimas del 11-S en EEUU
La muerte en las últimas horas de otros seis soldados de EEUU ha elevado a 2.982 soldados la cifra de bajas militares mortales estadounidenses en Irak desde 2003, más que las 2.973 personas de los atentados del 11-S. Las cifras del Pentágono siempre se sitúan por debajo del recuento de otros grupos y organizaciones. El Pentágono lo justifica porque no se contabilizan hasta que han sido informadas las familias. La web Iraq Solidaridad asegura, en uno de sus últimos informes, que EEUU está perdiendo en diciembre en Irak cuatro soldados diarios. Octubre fue un mes aciago para EEUU, con 98 muertos, según el recuento oficial. -
Medio centenar de muertos en atentados sólo en Bagdad
BAGDAD Al menos veinte personas murieron al caer la noche en un atentado con coche-bomba en el barrio sunita de Adamiyah, en el norte de la capital iraquí. 35 personas resultaron heridas en la explosión, registrada cerca de la mezquita Abu Hanifa al-Nooman. Fue precisamente ante esta mezquita donde Saddam Hussein hizo su última aparición pública en 2003 antes de huir de Bagdad ante el avance de las tropas invasoras estadounidenses. El atentado tuvo lugar después de que se conociera la ratificación de la sentencia de muerte contra Saddam, detenido por los soldados ocupantes a finales de ese año en Tikrit. En el norte de Bagdad, sobre la ribera este del Tigris, el barrio de Adamiyah es un bastión de la resistencia y escenario de combates diarios con los ocupantes. No fue el único atentado del día. A media mañana, tres coches-bomba explotaron casi simultáneamente en una de las principales avenidas del barrio mayoritariamente chiíta de al-Bayiha, muy frecuentado a esas horas. 25 personas murieron y 70 resultaron heridas, según un balance que apuntaba irremisiblemente al alza. Otras cuatro personas murieron en una explosión en un mercado. Cuatro policías, incluido un teniente-coronel, murieron en un ataque en la capital, donde se anunció el hallazgo de 41 cadáveres Tres civiles murieron en una explosión en Kirkuk, Kurdistán Sur.
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