DEPORTIVO ALAVES 3
LORCA
1
GASTEIZ
Lo necesitaba y se lo merecía. Después de tantos sinsabores y decepciones, el fiel público de Mendizorrotza pudo disfrutar ayer al fin de una plácida, cómoda y muy merecida victoria que comienza a reponer el depósito de fe e ilusión que se había derramado en los últimos meses. No se puede obviar que el equipo de Fabri tuvo enfrente a un rival muy limitado, que demostró por qué es carne de Segunda B, pero después de todo lo que ha pasado, un triunfo como el de ayer era tan necesaria como que llueva.Además de los tres puntos, el aficionado albiazul encontró varios motivos para el optimismo, comenzando con la ubicación de Dmitry Piterman, que volvió a estar en el palco. Puede ser también que estábamos acostumbrados a muy poco, pero el lavado de cara albiazul fue patente desde el inicio.
Las caras nuevas también gustaron. En su primer partido, Wellington Paulista demostró capacidad de trabajo y sacrificio, además de los movimientos y la calidad que se le presuponía, y quizá la nota más positiva fue la aportación de Elton que, vistas sus prestaciones de ayer, pocos se explican cómo ha podido estar sin ficha y con tan pocos minutos el año pasado.
La presencia del brasileño fue la principal novedad en un once inicial que se mostró mucho más dinámico que actuaciones pretéritas. Aprovechando un comienzo muy romo y acomplejado del Lorca, un Alavés con energías renovadas y con fe en el cambio en el banquillo, movió el balón y profundizó por bandas como hacía tiempo no lo hacía y arrolló de inicio al equipo murciano, que se defendía como buenamente podía.
Gol tempranero
El encuentro se puso además especialmente cómodo ya que el Alavés se adelantó muy pronto en el marcador. Justo en la falta en la que se recriminó penalti entendiendo que el defensa tocó el balón con la mano dentro del área, Astudillo aprovechó la desidia de la defensa visitante para rematar sobre la línea el centro de Toni Moral.El Lorca, mermadísimo en su zona defensiva, sufrió especialmente por su carril derecho, donde no tenía un lateral específico y Toni Moral se mostraba especialmente activo. Wellington, de jugada personal y de remate de cabeza, Rubén Navarro y De Lucas tuvieron ocasiones para sentenciar en la primera mitad tanto por número como por claridad de las mismas, pero no acertaron.
No es que apretara mucho el Lorca, apenas un remate lejano de Yagüe, pero quien más quien menos presumía que el Alavés podía terminar sufriendo y lamentando las ocasiones marradas al ver que el ritmo y la velocidad del juego albiazul decrecían, pero la suerte se alió con Rubén Navarro para premiar la buena triangulación de éste con Moral, envenenando un remate del catalán tras golpear en la espalda de Juanpa.
Por si el 2-0 no dejó el partido lo suficientemente decidido, pese a los intentos de Salmerón de cambiar la dinámica con sus cambios, Pablo Casar sacó partido de la desidia del Lorca en las jugadas a balón parado e hizo el 0-3 al rematar un buen centro de Rubén Navarro.
Con todo sentenciado, el Alavés pudo golear pero fue el Lorca el que hizo su gol del honor.
Buena aportación de los «fichajes»
Había ganas por ver en acción a Wellington Paulista y el brasileño gustó con sus movimientos y detalles, pero sobre todo por su capacidad de presionar. Sin embargo, la sorpresa más grata fue, sin duda, la buena labor de Elton en el centro del campo. Pese a llevar mucho tiempo sin apenas jugar, el brasileño manejó bien a su equipo y dio criterio a la salida del balón. De Lucas, el otro «fichaje» también rindió a buen nivel, demostrando que es un lujo prescindir de él por otros motivos. -