El proceso de paz no ha culminado». Es el lema de una de las pancartas que simpatizantes del FMLN desplegaron en la Plaza Cívica, en el centro de San Salvador. Mientras, en un colorido y tenso acto celebrado en el Anfiteatro de la Feria Internacional, el Gobierno de Antonio Saca conmemoró el 15 aniversario de los Acuerdos de Paz, firmados el 16 de enero de 1992 en el Castillo de Chapultepec de México entre el entonces presidente Alfredo Cristiani y la ex guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional. De esta manera se puso fin, de forma oficial, a 12 años de cruenta guerra que provocaron 75.000 muertos, 8.000 desaparecidos y miles de lisiados y desplazados.Las heridas aún perduran. La recuperación de la memoria histórica, la depuración de la fuerza pública, marcada por el genocidio, y la erradicación de las causas sociales y económicas que motivaron el conflicto continúan en el aire.
En su intervención, Saca del partido derechista Alianza Republicana Nacionalista manifestó que el motivo de esta conmemoración era recordar a las víctimas de la guerra. A este respecto, única y expresamente citó a «la gente que trabajó en la defensa de la soberanía nacional, como la Fuerza Armada». También reconoció la labor de el ex presidente Cristiani del mismo partido que Saca por «su visión como estadista».
«Con los Acuerdos de Paz pasamos de un país donde el perverso espíritu del miedo se había apoderado de nuestra realidad, a un país donde hoy los salvadoreños gozamos de absolutas libertades. Pasamos a un esquema civil del poder que se ha convertido en la base de la sociedad que todavía estamos construyendo», subrayó Saca.
Tras resaltar que su obligación es hacer «un sano balance entre el realismo y el optimismo», reconoció que los retos son cada vez más complejos en áreas vitales como la seguridad, la modernización institucional, el sostenimiento de la reactivación económica y la innovación productiva.
No obstante, dijo que El Salvador está «totalmente transformado» y que, «de acuerdo a las Naciones Unidas, los Acuerdos de Paz están finiquitados».
Peticïón del FMLN a la ONU
Esta valoración no fue en absoluto compartida por el FMLN. La diputada Nidia Díazpidió a la ONU una «auditoria política» que contraste el cumplimiento de los acuerdos, un relator de derechos humanos y un perito internacional para que investigue «por qué la Fiscalía no tiene voluntad para investigar a fondo los delitos» en la guerra.Esta fricción quedó patente en la celebración del martes en el Anfiteatro, a la que asistieron los presidentes de Nicaragua, Daniel Ortega; de México, Felipe Calderón; de Guatemala, Oscar Berger y de Honduras, Manuel Zelaya, además de altos cargos institucionales de Panamá, Costa Rica, Belice y República Dominicana. El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, envió un mensaje en el que puso al proceso salvadoreño como «ejemplo» para otros países en conflicto. En las calles, mientras tanto, se sucedían las movilizaciones ciudadanas. En San Salvador, por ejemplo, varias columnas de hombres y mujeres vestidas de rojo se concentraron frente a la Catedral para participar en la vigilia convocada por el FMLN y denunciar el incumplimiento de lo acordado.
Algunos sectores de la Iglesia salvadoreña también se han mostrado críticos. En una entrevista al canal 21 de televisión, el obispo auxiliar Gregorio Rosa Chávez remarcó que tanto el Gobierno como la empresa privada optaron por un modelo neoliberal que «funciona fabricando más pobres». «La gente está muy desanimada, eso indica que la percepción de lo que pasó después de la firma de los acuerdos es básicamente preocupante», destacó.
Por su parte, el rector de la Universidad Centroamericana de El Salvador, el jesuíta José María Tojeira, afirmó al rotativo mexicano “La Jornada” que «hay muchospendientes sin solución. Aquí no existe el concepto de reparación del daño. No se caminó en el sentido que marcaban los acuerdos; por el contrario, hay máspolarización social, política y económica. Y más violencia».
En este sentido, reiteró que los verdaderos protagonistas, «la víctimas que con su dolor movieron el proceso de negociación, están en el olvido». -