Lotina y Fuentes coincidían el viernes a la hora de transmitir confianza en las posibilidades de la permanencia y pedir un mayor optimismo. El técnico ve a su equipo ahora en condiciones de ser competitivo, pero no hay ningún mensaje en el mundo del fútbol que se pueda sostener durante mucho tiempo sin el aval de los resultados y pretender eliminar el pesimismo es imposible si esta tarde no se rompe una racha de un punto en los últimos cinco partidos.

No sólo los mensajes caen en un saco roto sin resultados, también la continuidad de Lotina será difícil de sostener con semejante trayectoria. Sólo los goles y un triunfo en Huelva pueden avalar un mensaje de optimismo y la continuidad del técnico de Meñaka.

Para ello cabe esperar que hoy repitan la mayoría de los jugadores que comenzaron contra el Madrid. Aitor ocupará el lateral que queda vacante con la lesión de Garrido y la única duda estriba entre Aranburu y Germán Herrera para ser el jugador que actúe más cerca de Kovacevic.

El lunes Lotina dijo que iba a jugar con dos delanteros y dejó entrever que iban a ser Herrera y Skoubo, el miércoles ensayó con el argentino y Kovacevic y el jueves comenzó con Aranburu y el serbio. Prescindir de un referente como el azpeitiarra en un momento en el que hacen falta jugadores de sus características parecería una mala idea, máxime si es el autor de los últimos dos goles de su equipo.

Al margen de la resolución de esa duda, la Real es consciente de que debe jugar de manera diferente a como lo ha hecho esta temporada, especialmente fuera de casa, donde sólo ha marcado dos goles. Todos admiten que el equipo debe jugar con las líneas más adelantadas y que es fundamental robar el balón lo más cerca posible de la portería rival, lo que facilita llegar antes, con más jugadores y con el rival peor colocado y con menos defensores por detrás del balón.

Claro que para eso hay que presionar bien la salida del balón rival porque, de lo contrario, jugar con la defensa adelantada puede ser un suicidio ante un equipo que destaca por la calidad de pasadores como Viqueira y Cazorla y la velocidad de delanteros como Uche, Rosu y Sinama Pongolle, que al final entró en la convocatoria e incluso puede ser titular.

El Recre es un equipo que juega a la perfección a la contra. De hecho, ha sumado casi tantos puntos fuera, dieciséis, como en casa, diecisiete. Es un conjunto que, a diferencia de la Real, tiene muy claro cómo debe jugar apoyado en unos jugadores básicos y por ello tiene 19 puntos más en la clasificación pese a tener mucho menos presupuesto. Y es que el Recre es uno de los equipos que demuestra que el problema de la Real no es el dinero gastado en los fichajes.