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Fallece al caer de un tejado donde trabajaba sin un arnés de seguridad

Un trabajador de 29 años murió ayer al caer desde un tejado en la localidad de Ortuella. Según Osalan, el accidente se produjo al romperse uno de los paneles del tejado y el fallecido no contaba con un arnés de seguridad. Ya son 18 los accidentes mortales en Euskal Herria.

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Un trabajador falleció ayer en un accidente laboral al caer desde el tejado de un pabellón en obras dentro del polígono industrial Granada, del municipio de Ortuella. El siniestro ocurrió hacia las 9.50, cuando D.E.B., de 29 años, y vecino de la localidad cántabra de Castro, cayó debido a un golpe de viento que le hizo precipitarse desde una altura de ocho metros, según detalló el sindicato CCOO.

En el primer informe realizado por Osalan se ha constatado que el trabajador «no llevaba arnés de seguridad y tampoco existía en el tejado una línea debida a la que asegurar el arnés».

Osalan estimó que la altura de la caída fue de once metros, y que se produjo cuando se encontraba trabajando sustituyendo paneles en el tejado de un pabellón de la empresa Macresa y un panel recién colocado se rompió, provocando la caída al suelo del trabajador. Según explicó Osalan, el trabajador fallecido pertenecía a la empresa Montajes Hermanos García S.A., que, a su vez, está subcontratada por construcciones Elido S.A.

Dieciocho muertes

Con este accidente son ya 18 las personas fallecidas en su puesto de trabajo en Euskal Herria durante este año.

CCOO convocó una concentración de protesta para el próximo lunes frente a la empresa del polígono Granada de Ortuella. El sindicato indicó que «las circunstancias en las que se produjo responden, una vez más, al prototipo más habitual de trabajador fallecido: joven, con contrato temporal, en el sector de la construcción y trabajando en una obra donde la cadena de subcontratación de las tareas alcanzaba el tercer grado y las medidas de seguridad brillaban por su ausencia». Denunció, además, el «oscurantismo y la irresponsabilidad de la empresa principal en esta obra, que aparte de intentar ocultar cualquier tipo de dato sobre el accidente desde un primer momento, su única preocupación ha sido la de cuánto le iba a suponer el accidente económicamente».

Por otro lado, dos empleados de la fábrica de tratamiento de lodos Lur Bizi de Baiona sufrieron una accidente ayer cuando intervenían en un tapiz rodante que tuvo una avería eléctrica. Al parecer cayeron al suelo cuando la máquina volvió a arrancar.

Los dos hombres, de 27 y 42 años respectivamente, fueron conducidos a la clínica Saint-Etienne. LAB denunció que accidentes como éstos no son resultado de la mala suerte, sino de las malas condiciones de trabajo, y convocó una concentración para el lunes a las 18.00 frente al Ayuntamiento de Baiona.

Subcontrata

CCOO indicó que el accidente responde al prototipo de muerte de un trabajador joven, con contrato temporal, en el sector de la Construcción y en una subcontrata sin medidas de seguridad.

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