El Leopold Museum inauguró ayer una exposición constituida por acuarelas, manuscritos ilustrados, cartas y poesías del premio Nobel Herman Hesse (1877-1962), que rebelan facetas prácticamente desconocidas del autor de «El lobo estepario». La muestra se centra sobre todo en la pintura, que el escritor empezó a cultivar en plena crisis nerviosa. «No estaría vivo si no me hubiese salvado la pintura»», escribió.