UPN y CDN se han desenmascarado invitando al PP a acudir a la marcha que se celebra este sábado en Pamplona, bajo el lema «Fuero y libertad. Navarra no es negociable», cuya traducción es «Miedo a perder el poder. En Navarra no puede haber cambio». Y para sentirse fuertes convocan a los dirigentes del PP, desenmascarando lo que en décadas ha tratado de ocultar UPN: que el fuero le importa un rábano, tanto como Navarra a su socio el PP, que cuando gobernó en Madrid se pasó la voluntad de los navarros y navarras sobre el polígono de tiro de las Bardenas y la guerra de Irak por donde quiso.

A mí estos señores no me representan: ni como navarro, ni como ciudadano, ni como demócrata. Ahora resulta que el que no vaya a la manifestación está contra el fuero y la libertad. Yo soy navarro, estoy a favor del fuero y la libertad y no voy a ir a esa manifestación. ¿Es que la derecha nos va a quitar hasta el derecho a elegir cuándo nos manifestarnos? ¿Dónde está la iz- quierda? Y quiero aclara otra cuestión: esta manifestación no es contra Zapatero, sino contra todos los navarros y navarras que no entendemos ni el fuero ni la libertad como ellos, entre otras cosas porque creemos mucho más, y con más argumentos, en lo uno y en lo otro. Tal vez sobre este tema sí debería pasar el señor Miguel Sanz por el polígrafo: qué hace su gobierno con el fuero y qué han hecho con las libertades. Qué hicieron sus predecesores con la República y la de- mocracia. Qué han hecho UPN-CDN con la estela de Germán, y con los fusilados en la Guerra Civil. Qué hacen con el euskera. Qué han hecho con el proceso de paz. Por mucho sus invitados gritaran en Madrid «no somos fachas», sabemos lo que son.

El fuero les importa un bledo, sólo les importa conservar el huevo de la gallina de oro que son para sus intereses particulares las arcas públicas de Navarra. Que pase el señor Sanz por el polígrafo. Seguro que disparará audiencias de los programas de tarde. La libertad sí les importa: le tienen miedo. Miedo a que los navarros decidan, a que piensen, a que voten en contra de sus intereses. Podemos. Y desde luego yo, voy a hacerlo.