El primer largo del cortometrajista gallego Ricardo Cortés, premiado por «Yul» y «15 días», es una sátira social que toma los concursos televisivos como metáfora del sistema capitalista, consagrado a crear la sensación generalizada de que es posible triunfar económicamente gracias a la suerte y las oportunidades excepcionales llovidas del cielo. En cambio, para el protagonista de «Concursante», el ganar de golpe premios por valor de quinientos millones de euros supondrá el inicio de su caída sin paracaídas en el abismo. El actor argentino Leonardo Sbaraglia encarna a un modesto profesor de economía que verá convertirse el ansiado sueño de obtener una fabulosa recompensa material, la mayor entregada jamás por un concurso de televisión, en una auténtica pesadilla.

Sus penurias vendrán por la imposibilidad de mantener el avión, el barco o los coches que le han tocado, al no disponer de efectivo. A medida que intente vender esos valiosos objetos, la codicia se irá desatando a su alrededor, empezando por su novia. El nombre del contrariado protagonista ya lo dice todo: Martín Circo Martín.