EUSKALTEL-EUSKADI Balance
Los dos triunfos han supuesto una tranquilidad necesaria
El nuevo Euskaltel-Euskadi ha comenzado con buen pie el ejercicio 2007. Las victorias de Unai Etxebarria y Koldo Fernández de Larrea y la actitud son la cara, aunque el equipo debe mejorar todavía.
Unai IRARAGORRI | BILBO
El triunfo de Fernández de Larrea en la Tirreno-Adriático ha supuesto un impulso al Euskaltel-Euskadi y, ante todo, un soplo de «tranquilidad». Igor González de Galdeano realiza un balance positivo del inicio de la temporada, aunque sí espera un rendimiento mayor en la Vuelta al País Vasco. El gasteiztarra apuesta por la victoria con Samuel Sánchez.
Mallorca, Andalucía, Valencia, Clásica Almería, Murcia, París-Niza, Tirreno-Adriático y Santarem han sido las pruebas que ha disputado el Euskaltel-Euskadi. Al término de cada periodo de competición, el secretario técnico se reúne con los tres directores del equipo, Gerrikagoitia, Carbayeda y Odriozola. «Realizamos reuniones periódicas después de las carreras. Ahora, por ejemplo, hemos esperado a que llegue Jon para hacer una. Los directores hacen informes de cada carrera. Son 29 corredores y es necesario que haya comunicación entre todos».
Los triunfos de Etxebarria en Mallorca y de Koldo en Tirreno han dado «tranquilidad» al Euskaltel-Euskadi cara a los próximos compromisos. «Eso es importante para seguir trabajando como hasta ahora», señala. «En cuanto a victorias el balance es positivo. La primera victoria en el Pro Tour, junto con la de Mallorca, eso al equipo le da mucha tranquilidad. Esto es como el balance de una empresa; los resultados son los que cuentan y en ese sentido vamos bien».
«Me quedo, sobre todo, con el cambio que ha habido en el equipo. Hay mucha gente joven y nueva que ha aportado mucha ilusión, y eso ayuda a seguir trabajando en esa línea», añade.
Autocrítica
No está tan satisfecho con el conjunto. «Quizá no están saliendo las cosas como esperábamos. El equipo en la París-Niza estuvo bien, pero por debajo de lo que creíamos, con la única excepción de Samuel que, aunque no estaba tan bien como el año pasado, ha ido a más y confío en que a País Vasco va a llegar en un gran momento».
El balance es el mismo en la Tirreno-Adriático. «Se ha fallado», admite. «La actitud, sin embargo, ha sido muy buena, y yo creo que Odriozola ha hecho un gran trabajo. La apuesta de Koldo ha salido y es lo que el equipo tiene que hacer, sacar gente joven hacia adelante y que nos den esos resultados».
Dos victorias a 20 de marzo no está mal, sobre todo, si se tiene en cuenta que, como el propio González de Galdeano nos recuerda, «el año pasado nuestra primera victoria llegó en País Vasco». «Estoy tranquilo porque el equipo ha puesto mucho de su parte para intentar estar lo mejor posible. Por otro lado, siempre he dicho que el inicio con el cambio que ha habido no iba a ser fácil y eso es cierto. Las victorias no son casualidad sino fruto del trabajo de este invierno, seguro».
Lo cierto es que la caídas y las enfermedades han reducido las posibilidades naranjas. En torno a diez corredores están o han estado de baja: Velasco, Txurruka, Isasi -el peor parado con una fractura de clavícula-, Galdos, Galparsoro, Bru, Joseba Zubeldia... «Esas bajas se notan», señala.
A por todas en casa
Cara a la Vuelta al País Vasco, González de Galdeano ya tiene cerrado el bloque. Samuel Sánchez, Rubén Pérez, Verdugo, Astarloza, Landaluze y Azanza tienen plaza segura. «Etxebarria será el sustituto de Isasi y la última plaza se decidirá tras la Milán-San Remo».
«El objetivo con Samuel es ganar, no lo voy a negar, igual que el año pasado. No podemos partir con un objetivo que no sea ése, sobre todo, con un corredor como Samuel. El recorrido es muy selectivo y si acompaña el tiempo será un recorrido bonito y brillante. Si no, será aún más duro y difícil».
En el Giro, hay diez corredores, los jóvenes del equipo, para nueve plazas. Peña, Velasco, Luengo, Mayoz, Aperribay y Aitor Hernández, entre otros.
No podemos pasar por alto preguntar a González de Galdeano por Fernández de Larrea, de moda tras su estupenda victoria en San Benedetto. Le pedimos que nos dibuje el futuro de su pupilo con los pies en el suelo. «Va a llegar hasta donde él quiera», revela. «Cuando yo le conocí era un poco inestable, no tenía continuidad, tenía un periodo que andaba bien y otro en el que no era tan brillante. Ha logrado ser regular en su trabajo y eso es lo que ha hecho que consiga esa victoria. Así que si sigue esa línea le veo ganando etapas en el Giro y en el futuro ganando en cualquier sitio».
«Va a ser un hombre importante de cara al futuro de este equipo para aportar victorias», apostilla. «Teníamos mucha confianza en él y nos la ha devuelto. Sobre todo, se lo merece él porque ha trabajado mucho para ello», explica.
El siguiente reto es la Milán-San Remo. La classicissima todavía le puede quedar grande, admite González de Galdeano. «Lo veo complicado. Está claro que con la confianza que le ha dado la victoria estará delante. ¿Disputando? Sería una gran sorpresa. Todavía tiene que conocer bien esa carrera», admite.
La victoria de Fernández de Larrea no ha sido flor de un día, sino que el ciclista gasteiztarra ha sido el corredor naranja que más ha brillado en este inicio, pues ya rozó el triunfo en la Vuelta a Andalucía.
En concreto, el conjunto de Miguel Madariaga suma ya 20 puestos entre los diez primeros, de los que ocho corresponden Koldo, por cinco de Samuel, dos de Galdos, y uno de Etxebarria -la victoria en Mallorca-, Luengo, Rubén Pérez y Astarloza.
El asturiano ya ha asomado en la París-Niza, mientras que Zubeldia y Antón tienen sus objetivos en mayo y junio. Una caída ha frenado la preparación de Galdos e Isasi. U.I.
