El cantante donostiarra Mikel Erentxun aseguró ayer que se siente «a gusto» en la etapa que ha emprendido con su último disco, «El corredor de la suerte», en la que por primera vez sus letras se acercan al «compromiso social». Sin embargo, reconoció que en sus planes está hacer «un parón», una «penúltima despedida» para dedicarse «a otras cosas».

Erentxun habló ayer para la prensa en el Teatro Victoria Eugenia de Donostia, donde el próximo viernes, día 20, presentará su nuevo disco dentro de una gira que se extenderá hasta diciembre y que le llevará también a Estados Unidos y a Perú.

Fue en este escenario de su ciudad natal donde Duncan Dhu grabó en 1994 su doble álbum en directo «Teatro Victoria Eugenia» y donde, según afirmó, desearía hacer un nuevo disco en directo junto a otros compañeros de profesión para dar paso a «ese parón», una emulación de «El último vals», de Martin Scorsese, película de la que afirmó estar «colgado».

«Sería un penúltimo vals a la donostiarra», señaló el cantante, quien advirtió no obstante de que es una idea que aún está en el aire y que ni siquiera ha comentado a su discográfica.

En su cabeza está el dedicarse a otros proyectos mientras observa qué es «lo que pasa con la industria», que, según dijo, vive un momento en el que priman los conciertos en directo sobre la venta de discos.

Erentxun indicó que, como muchos otros grupos y cantantes, él se encuentra inmerso en esa «paradoja» que le permite ofrecer un mayor número de conciertos cuando menos discos está vendiendo.

Cree que es «algo que tampoco está mal» pese a los «años malos» del mundo discográfico, pues aseguró que disfruta «muchísimo del directo» y se siente muy cómodo en los teatros, clubes y auditorios, los «aforos medios» en los que se está desarrollando la gira de «El corredor de la suerte».

El ex cantante de Duncan Dhu destacó que estos espacios son «perfectos» para interpretar las canciones de este disco, de sonido «más desnudo» y «más áspero» por la falta del teclado en el escenario.

Manolo Mejías, el bajo habitual del grupo Amaral, Rufo Urbina a la batería y Ander Caballero y Erentxun con sus guitarras componen el cuarteto que tocará en el Victoria Eugenia los temas de «El corredor de la suerte», además de otros que Erentxun considera importantes de su carrera en solitario, y también alguno de Duncan Dhu.

«Compromiso social»

Será un momento para comprobar la aproximación del compositor donostiarra a «cierto compromiso social» en las letras escritas junto a Jesús Mari Corman, en las que habla del conflicto vasco, las drogas, la inmigración o la pena de muerte. «Tengo 42 años y me apetecía cambiar. Me siento a gusto. El disco sigue sonando honesto y creíble y con un poso de madurez que no había antes, aunque no me guste la palabra madurez», manifestó.