Miguel Angel Lotina se equivocó el viernes en una rueda de prensa en la que estaba demasiado indignado por las críticas recibidas, fundamentalmente, por la suplencia de dos de los jugadores que más confianza dan a sus compañeros y a la afición. Para justificar su suplencia, en lugar de decir la verdad y decir que se debe a cuestiones técnicas, apuntó unas molestias irrelevantes, sobre todo en el caso de Aranburu, cuando casi todos los jugadores de Primera llegan a final de temporada con cargas musculares mayores.

El azpeitiarra se encontró ayer ante el papelón de tener que desmentir lo manifestado por su técnico: «Me he entrenado con algunas molestias en el aductor que no tienen nada que ver con la lesión de rodilla, pero tampoco le daría demasiada importancia. Los jugadores tenemos muchos entrenamientos y muchas semanas en las que entrenamos con molestias y es difícil que todo el año estés fresco, sin ningún tipo de molestias, golpes o torceduras. Muy pocas veces un jugador se entrena sin molestias. Lo colocaría dentro de la normalidad y tampoco he fallado a ningún entrenamiento. No es nada grave y no hay ningún problema por eso».

El azpeitiarra rechazaba también cualquier relación entre las molestias y su juego en sus últimos partidos y reconocía que en ellos «no lo hice muy bien ni estuve acertado. No me sorprendió que no jugara hace tres semanas, pero no quiero hacer un drama de esto. Lo principal es que salgamos de esta situación y debemos aparcar las situaciones personales más que nunca».

Evidentemente Aranburu no jugó muy bien en sus últimos partidos con el balón, pero sí su equipo y probablemente tenga mucho que ver la presencia del jugador quizás más valorado en el vestuario. Y su equipo acusa cuando no está en el campo. En Villarreal no jugó bien, pero Rivas y Garitano parecían Xavi e Iniesta a su lado. Salió del campo y Mikel Alonso lo hizo bien, pero los castellonenses sólo fueron superiores en su ausencia y pese a jugar con diez. A partir de ahí, en los tres partidos que no ha jugado ningún minuto el azpeitiarra, la Real ha sido superada en el juego por rivales de poca entidad y sólo la fortuna ha permitido lograr dos victorias.

El balance de ocasiones

Porque el resultado es lo único importante y lo de jugar mal o bien no importa, pero la clave está en las ocasiones que crea un equipo y las que recibe. Cuando un equipo concede siete ocasiones y sólo crea una como en Sevilla lo normal es que pierda. Y si se analizan los partidos que juega Aranburu y los que no se verá que aquellos en los que el equipo blanquiazul ha tenido ese balance de ocasiones favorable estaba en el campo.

El problema es que pierde más balones de los deseables entre otras cosas porque las rivales también le presionan más que a otros. Y los que no los pierden son los que no arriesgan y los pasan atrás. Lotina prefiere evitar esos riesgos, jugar con dos medios centros defensivos que apenas juegan el balón. Esa es la única razón por la que no juega Mikel Aranburu.

De cara a una posible alineación ante el Atlético, Aranburu manifestó que «por estas molestias no hay ningún problema. Si no pasa nada raro de aquí al sábado no creo que tenga ningún problema para jugar».

Ante la contradicción evidente entre lo manifestado por Lotina y lo señalado por el jugador, Aranburu dijo que «eso hay que preguntárselo a él. Yo sólo puedo decir que yo y todos los jugadores debemos respetar más que nunca lo que decide el entrenador y apoyar a los compañeros. Bastante trabajo tenemos con sacar esto. Estoy convencido de que toma las decisiones pensando que es lo mejor para el equipo. Yo no voy a decir que estoy contento por no jugar, pero más que nunca hay que anteponer la situación del equipo. Como yo, hay otros compañeros que no están jugando y cuando no jugamos, por lo menos, no debemos molestar. Me gustaría jugar más, pero es lo que hay. El entrenador busca lo mejor para el equipo y si los resultados son buenos como el último mes, al final todos estamos contentos».

Lo que sí dejó claro es que su suplencia no tiene ninguna relación con su futuro porque ya ha jugado los minutos que necesitaba para renovar por un año más y además está muy cercana la firma de un nuevo contrato.

Una victoria clave

En el plano colectivo señaló que no hace cuentas sobre los puntos necesarios para lograr la permanencia. «Tenemos que pensar sólo en que necesitamos dos victorias más que nuestros rivales más cercanos» y destacó la importancia de ganar el sábado contra el Atlético de Madrid apoyados en un ambiente que seguro que será muy favorable ante la gran respuesta que se espera del abonado para retirar hoy las 9.000 entradas gratuitas de once a una y cinco a ocho en la taquilla número 9 de Anoeta o en el teléfono 943 47 39 53.

Aranburu señalaba que el sábado «tenemos una buena oportunidad en casa en un partido bonito de jugar para reducir las distancias y todos pensamos en ganar y estar el lunes a tres o cuatro puntos de la salvación. El ambiente será buenísimo y antes de jugar no hay ninguna excusa para afrontarlo».