La actividad sísmica en los alrededores del embalse de Itoitz no para, sino que incluso se intensifica con el llenado del pantano. Así lo demuestran los datos recogidos durante todo este mes de abril, según los cuales, en este tiempo se han registrado un total de 120 terremotos de diferentes magnitudes en las cercanías del pantano.

Estos datos sacan a la luz, además, que los movimientos sísmicos se suceden con cada vez mayor asiduidad, ya que los 120 terremotos de abril suponen más de la sexta parte de los 689 sismos registrados desde que comenzara el llenado de este polémico pantano.

Los 120 terremotos del mes de abril aportan un dato preocupante, según la Coordinadora de Itoiz, y es que este último mes, como media, se han sucedido 4,6 sismos diarios. Aunque algunos de ellos sean imperceptibles para la población, otros han sido nítidamente sentidos en varios pueblos de la zona. Además, esos más de cuatro terremotos diarios no son fruto del azar, sino que han coincidido con el llenado del embalse.

Catorce en el vaso

De los más de 120 movimientos registrados en el último mes por el Instituto Geográfico español, más de 60 han tenido lugar en las últimas dos semanas. Concretamente, desde el pasado 14 de abril se han contabilizado 62 terremotos, de los cuales catorce han tenido su epicentro en el mismo vaso del embalse. Los epicentros de todos los terremotos fueron registrados en las inmediaciones del pantano. Aunque hay algunos cuyos epicentros se localizaron algo más lejos -los más lejanos fueron dos registrados los días 18 y 19, con sus epicentros en Beriain y Biurrun-, la inmensa mayoría ha sido localizados a pocos kilómetros a la redonda del vaso del pantano.

Todos los terremotos, además, tuvieron magnitudes que oscilaron entre los 0,4 y 1,9 grados, siempre según la escala Richter.

El episodio de mayor magnitud tuvo lugar el 14 de abril y tuvo el epicentro en la localidad de Zunzarren (valle de Lizoain), a 11 kilómetros del pantano de Itoitz. Otro episodio de notoria magnitud, muy cercano a este descrito, ocurrió el día 18, cuando hacia las 22.42 el IGN registró un terremoto de 1,8 grados en la escala Richter con epicentro en Zolina, localidad ubicada en el valle de Aranguren.

El resto de movimientos fueron de menor grado, pero no por ello la cantidad de movimientos deja de ser alarmante. Y es que desde el 14 de abril y hasta el día 26 no ha pasado más que un día sin que se hayan registrado terremotos. Ese día, casi novedoso para los habitantes de la zona, fue el 16 de abril. El resto de los días se han sentido terremotos, siendo especialmente preocupante lo acontecido el 22 de abril, cuando se registraron un total de catorce movimientos sísmicos. Estos tuvieron unas magnitudes de entre 0,4 y 1,4 grados en la escala Richter. Muy de cerca le siguió el día 20, ya que ese día el IGN contabilizó 11 sismos.

Pero el resto de días también hubo terremotos: el 14 hubo uno, el 15 otro, el 17 cuatro, el 18 otros cuatro, el 19 seis, el 20 once, el 21 cinco, el 22 catorce, el 23 dos, el 24 otros dos, el 25 cuatro y el 26 dos.