La baja participación marcó las elecciones legislativas de ayer en Argelia. Hasta las 17.00 hora local (una hora más en Euskal Herria), sólo el 28,39% del electorado había acudido a las urnas, según informó el ministro argelino de Interior, Yazid Zherhuni. En una declaración emitida por la televisión estatal, reconoció que la cifra de votantes era casi diez puntos inferior a la que, a esa misma hora, se registró en los comicios de 2002.

Alrededor de 19 millones de argelinos estaban convocados a las urnas para elegir de entre 12.290 candidatos a los 389 diputados que integrarán la Cámara Legislativa. La mayor afluencia de votantes se produjo en las provincias del sur, donde, por ejemplo, en Tamanraset, el índice de participación superó el 30%. Por el contrario, en Argel y en la zona de Cabilia, al norte, la participación fue muy escasos. La jornada transcurrió bajo estrictas medidas de seguridad.

La comisión de control admitió que se han producido casos de fraude y dijo que han sido denunciados en un escrito dirigido al presidente argelino, Abdelaziz Buteflika. Afirmó que tiene constancia de que en varios colegios electorales de Ruiba, en la periferia de Argel, los agentes de la mesa se negaron a volcar las urnas antes de comenzar la votación para verificar que estaba vacían. En algunos colegios de Saida y Blida no había papeletas de varios partidos. También hubo enfrentamientos en cuatro ciudades.