El FOGASA (Fondo de Garantía Salarial) es un organismo dependiente del Ministerio de Trabajo, una de cuyas funciones es el pago de salarios e indemnizaciones por despido a los trabajadores de em- presas que hayan sido declaradas insolventes. Sus arcas se nutren, entre otras fuentes, de las cotizaciones de los trabajadores, así que el cobro de prestaciones no es una concesión graciable, sino un derecho. Una vez declarada la insolvencia, los trabajadores deben presentar una petición en el FOGASA, para que dicte resolución en la que reconozca la procedencia de la solicitud, dentro de los límites cuantitativos legalmente establecidos, y proceda al pago. Desde la entrega de la documentación hasta que el pago se lleva a cabo, suelen transcurrir dos o tres meses. Esto, claro está, sirve para la generalidad de los casos, pero no para el que hoy analizamos, que es «especial». Se trata del expediente de quienes fueron trabajadores de Batasuna.

Como consecuencia del auto del Juzgado Central nº 5 de 26/8/02, que acordó la suspensión de actividades y el cierre de sus sedes, los trabajadores afectados tuvieron que tramitar un expediente solicitando la rescisión de sus contratos de trabajo, que fue acordada por resolución de la Dirección General de Trabajo el 20/12/02. Tras este trámite, los afectados solicitaron del Juzgado de lo Social que se reconociera la deuda salarial generada desde el cierre y la fijación de las correspondiente indemnizaciones por despido, lo que ocurrió por sentencia de 30/9/03. Iniciada la ejecución de la sentencia, tratamos de cobrar de los bienes de Batasuna que habían sido embargados, pero resultó imposible, por lo que con fecha 14/12/05 se dictó auto declarando la insolvencia, que fue recurrido por el FOGASA y confirmado por el Juzgado el 3/3/06. Presentamos entonces la preceptiva solicitud de pago, y al cabo de mas de un año, siguen sin pagar lo que deben a los trabajadores afectados.

Durante este tiempo hemos hecho todo tipo de gestiones, tanto personales como por escrito, habiéndonos encontrado con sorpresas como que el 2/1/07 se nos notificara que concluida la tramitación del expediente en un corto espacio de tiempo se procedería al pago o incluso que se nos comunicara que se había pagado (¡) el 3/1/07, lo que es absolutamente incierto, o que ahora no se paga porque todo lo de Batasuna debe pasar, previamente, por la Abogacía del Estado y están muy ocupados con la impugnación de las listas electorales. Total que, por H o por B, o mejor dicho, por ser de HB, a los despedidos no les pagan lo que en Derecho y por sus cotizaciones les corresponde y, sin duda, les hubieran pagado ya, si no fueran trabajadores de HB. Les discriminan por razón de su ideología, y eso es inconstitucional y otras cosas. ¿Dónde estará el dinero que dicen que pagaron en enero?