Barroso defiende un modelo social y económico «sólido, pero flexible»
El presidente de la Comisión Europea, el luso Joao Durao Barroso, defendió ayer un modelo social y económico «sólido y seguro, pero flexible», lo que denominó la «flexiseguridad», y rechazó, ante la ampliación de la UE, que los derechos laborales vayan a igualarse a la baja.
GARA |
Durao expuso estos argumentos en su intervención ante el plenario del undécimo congreso de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), que congrega en Sevilla a unos mil delegados procedentes de 36 países europeos en representación de 81 confederaciones nacionales y de dos federaciones sectoriales.
El dirigente portugués, que ensalzó la «solidez» de los valores que han hecho posible la construcción europea en sus primeros 50 años de existencia, comenzó su intervención aludiendo a la previsión de crecimiento económico de la UE (2,9%) durante el periodo 2006-08, a la reducción del desempleo (6,7%) y a la «creciente, pero insuficiente» incorporación de las mujeres al mercado.
«El pleno empleo es la mejor herramienta para la igualdad social y la cohesión», apostilló el presidente de la CE, que admitió que hay «miedo» a la «nueva etapa» económica de la UE y a los cambios laborales, si bien se mostró convencido de que la evolución económica de la UE «no será una amenaza para el dinamismo y que se cumplirán» los compromisos sociales.
La UE, según Durao, debe ser la «fuerza motriz» de la apertura de la economía, aunque aclaró que hay que apoyar modelos que no vayan contra el mercado interior y mantengan los compromisos sociales, que «protejan, pero no sean proteccionistas».
En este sentido, no eludió críticas a algunos países y, sin mencionar a ninguno de ellos, comentó que «no es justo ni sincero que acusen» a la UE de sus problema internos.
Recordó que la CE se ha comprometido a realizar un inventario de la realidad social europea a partir de la ampliación a 27 de sus miembros, un trabajo para el que solicitó la «fundamental» colaboración de los sindicatos, y reconoció las «dificultades» para hacer uniforme a corto plazo el modelo social de la UE. Rechazó el «dumping social», las deslocalizaciones y la contratación de inmigrantes ilegales, lo que -según dijo- representa una utilización de la inmigración contra las garantías sociales, y explicó que se está preparando una directiva europea que fije sanciones penales contra la contratación de inmigrantes irregulares.
«Debemos ir a un modelo sólido y seguro, pero flexible, ante la nueva economía de los servicios y el conocimiento. Este modelo, conocido como el de la flexiseguridad ha tenido éxito en los países escandinavos», dijo.
Durao Barroso dice que «debemos ir a un modelo sólido y seguro, pero flexible. Este modelo, conocido como el de la flexiseguridad, ha tenido éxito en los país escandinavos».