Ahaztuak inicia una recogida masiva de testimonios de víctimas del franquismo
La asociación de víctimas del golpe de estado, de la represión y del régimen franquista «Ahaztuak 1936-1977» ha lanzado la iniciativa «Voluntarios de la memoria». Su objetivo más urgente es recoger, para que no se pierdan, los testimonios vitales de los represaliados de más edad.
Anjel ORDOÑEZ |
La mayor parte de las personas que vivieron en primera persona la represión franquista durante la guerra de 1936 y en los años posteriores, ha muerto ya. Un buen número de los que aún sobreviven, transcurridos setenta años desde aquel momento histórico, lo hacen en condiciones de salud que se deterioran rápidamente por su avanzada edad y que dificultan la transmisión de sus vivencias.
Por esta razón, Ahaztuak considera que la recogida de testimonios orales de estas personas es una labor que hay que afrontar con la máxima urgencia. Y ésta es una de las razones que fundamentan la iniciativa «Voluntarios de la memoria», presentada ayer en Deustua y que se pondrá en marcha a finales del mes de junio.
Para desarrollar esta tarea, Ahaztuak se ha puesto como objetivo generar grupos o «brigadas» de personas que se impliquen en dinámicas de trabajo voluntario, para que la recogida de los testimonios sea lo más extensa, eficaz y rápida posible.
Además, esta asociación también anima a que personas particulares se animen a participar por su cuenta, recogiendo declaraciones de familiares y amigos y haciendo llegar después las grabaciones o documentos escritos a Ahaztuak a través de canales como el correo ordinario (apartado de correos 26 de Algorta) el correo electrónico (1936-1977@euskalerria.org) o el teléfono (647910632).
«Nos interesa cualquier tipo de testimonio, oral o documental, y no sólo los de combatientes o personas con relevancia pública. Tenemos muchos ejemplos de que las narraciones de gente de a pie, de la calle, pueden llegar a ser estremecedoras y muy valiosas», matizó en el acto de presentación Martxelo Alvarez, portavoz de la asociación Ahaztuak 1936-1977.
Alvarez aseguró que los testimonios que se recojan no se utilizarán para fines editoriales ni similares, «lo que pretendemos es recuperar la memoria de lo que realmente fue la dictadura, nuestro único objetivo es perseguir la justicia».
En esta iniciativa -que coordinarán Josu Ziordia y Sonia Polo- Ahaztuak cuenta, hasta el momento, con el apoyo expreso de dos asociaciones de estudiantes: Ikasle Abertzaleak y Eraldaketa-Frente de Estudiantes. Esperan también nuevas adhesiones.
La iniciativa «Voluntarios de la memoria» tiene una segunda vertiente, que pretende reunir y organizar a brigadas de voluntarios que colaboren en los trabajos en torno a la localización y exhumación de fosas comunes. Estos trabajos se desarrollarán no sólo en los herrialdes del sur de Euskal Herria, sino también en otros puntos del Estado español.
El primer objetivo será recuperar 28 cuerpos que se encuentran enterrados en una fosa común en Ezkaba. «Pretendemos compartir los momentos, sentimientos y reflexiones que se viven en torno a las exhumaciones, y expresar nuestra solidaridad entre aquellos que reivindicamos los valores democráticos de quienes fueron asesinados y enterrados en esas fosas», manifestó Martxelo Alvarez.
El coordinador estos trabajos será Josu Ziordia, antropólogo que ya ha colaborado con la sociedad científica Aranzadi en dinámicas de exhumación de fosas.
En esta misma línea, también se llevarán a cabo trabajos para la señalización y adecentamiento de lugares significativos relacionados con la memoria histórica. Una de las primeras actuaciones será en la fosa de Azazeta, donde fueron ejecutados y enterrados 17 militantes.
Ahaztuak trabajará por la recuperación y preservación de elementos significativos de la denominada «arquitectura de guerra», ante la pasividad de las instituciones.