GARA > Idatzia > Euskal Herria

Urkullu llama al PNV a cerrar filas en la elección del EBB

El revés electoral y la incertidumbre sobre el mantenimiento del gobierno de instituciones como la Diputación de Gipuzkoa, se mezclan para el PNV con la apertura del largo proceso de elección del EBB. Su actual portavoz, Iñigo Urkullu, dudó ayer de que se repita la contienda entre Josu Jon Imaz y Joseba Egibar y llamó a las bases del partido a mostrar «firmeza» ante quienes quieren «enredar» desde fuera.

Iñaki IRIONDO |

El portavoz del EBB y presidente del BBB, Iñigo Urkullu, hizo ayer un llamamiento a la afiliación del PNV a que durante el proceso de elección de la nueva dirección del partido «miren los intereses que hay fuera para enredar dentro de casa». Al mismo tiempo, afirmó que no cree que el actual presidente, Josu Jon Imaz, y Joseba Egibar vuelvan a enfrentarse en los comicios internos como hicieron hace cuatro años.

Las palabras de Iñigo Urkullu han sido interpretadas por algunos sectores del PNV como un intento de condicionar tanto el debate como el proceso de elección de cargos internos, en los que la militancia jeltzale tiene un papel protagonista puesto que es quien propone los candidatos al EBB.

Tampoco se ha entendido con claridad qué ha querido decir el portavoz del EBB al manifestar su opinión de que Josu Jon Imaz y Joseba Egibar no volverán a pugnar por la presidencia del partido cuando ninguno de ellos se ha pronunciado al respecto. Fuentes cercanas al presidente del GBB señalan que su decisión estará ligada a los proyectos políticos, puesto que la fase asamblearia que se abre ahora incluye también el debate de las ponencias que, en teoría, deben marcar las líneas maestras de la actuación del PNV en los próximos años.

En las últimas décadas no se había producido un proceso interno de elección tan convulso como el de 2003, puesto que no solía haber más de un candidato con posibilidades de alcanzar la presidencia del EBB. El duelo entre Imaz y Egibar dividió a la militancia prácticamente por la mitad, y todavía hoy las brecha entre ambos sectores no sólo no se ha cerrado sino que a veces parecen agrandarse.

El complejo sistema interno del PNV hizo que la presidencia recayera finalmente en Josu Jon Imaz, que contó con los apoyos de las organizaciones territoriales de Bizkaia, Nafarroa e Iparradel. Sin embargo, según desveló Xabier Arzalluz en su libro autobiográfico «Así fue», Joseba Egibar obtuvo 5.709 votos, frente a 4.967 de su contrincante.

Arranque adelantado

La dirección del PNV ha convocado hoy a la Asamblea Nacional para hacer una valoración de los resultados de las elecciones. Además, el encuentro servirá para dar el pistoletazo de salida al proceso de elección del EBB, que culminará el próximo 2 de diciembre.

Este arranque se ha producido con cierta anticipación sobre los plazos que se dieron hace cuatro año. Ello permitirá que también concluya unas semanas antes que en anteriores ocasiones, a fin de que el partido pueda volcarse en la preparación de las elecciones a Cortes a celebrarse en marzo de 2008 si no media un adelanto.

Los candidatos al EBB y a su presidencia pueden ser propuestos por tres organizaciones locales o por los afiliados con el aval de cien firmas. Luego se abre un complejo proceso de asambleas locales y regionales a dos vueltas que concluye en una votación delegada de la Asamblea Nacional.

Ataques «de fuera»

En este contexto, ayer el portavoz del EBB, Iñigo Urkullu, afirmó que la organización jeltzale tiene que mostrar «firmeza» en este proceso interno. En una entrevista concedida a Euskadi Irratia, denunció que «otras fuerzas políticas y algunos medios de comunicación» pretenden «condicionar, de una u otra manera, la responsabilidad del liderazgo del PNV», por lo que apostó por «huir de ese juego».

Teniendo en cuenta este hecho y el importante papel que los afiliados y las organizaciones locales tienen en la elección, Iñigo Urkullu les invitó «a que miren los intereses que hay fuera del PNV para enredar dentro de nuestra casa».

Al haber expresado su opinión de que no habrá pugna entre Imaz y Egibar, a Urkullu le preguntaron sobre la posibilidad de que surja un candidato de consenso, lo que dijo ignorar.

Disputa abierta

Pese a los anuncios de Urkullu, que no se sabe aún en qué se concretarán finalmente, lo cierto es que en el seno del PNV se mantiene viva la disputa entre los partidarios de Imaz y los de Egibar, y los malos resultados de las últimas elecciones están siendo empleados como arma arrojadiza entre ambos sectores.

Al margen de cuestiones ajenas como la decisión de EA de no concurrir en coalición, desde los ámbitos de opinión cercanos a Joseba Egibar se mantiene que mensajes de Josu Jon Imaz como los referidos a su deseo de «cautivar a España» o la posibilidad de futuros pactos con el PP, así como la abierta complicidad con el PSOE, con quien el PNV ha ido de la mano en lo referente al proceso de normalización democrática, han desmovilizado al sector más abertzale del partido.

Desde el sector mayoritario en la dirección de EBB se responde a estas acusaciones señalando que donde mejor ha aguantado el partido ha sido en Bizkaia, mientras que donde ha perdido posiciones ha sido en Gipuzkoa -territorio que preside Joseba Egibar- y en Araba, donde también imperan sus tesis. Recuerdan además el efecto que ha podido tener el relevo de Juan Joxe González de Txabarri, los problemas surgidos en torno al primer candidato, Jon Jauregi, y las acusaciones de robo en la Delegación de Hacienda de Irun.

Contrariedad

Tampoco está contribuyendo a la buena digestión de los resultados por parte del PNV el observar que EA, hasta ahora socios de coalición y todavía de Gobierno en Lakua, se deja querer por el PSE para hacerse con la Diputación de Gipuzkoa e incluso con la de Araba.

Iñigo Urkullu denunció ayer «el ansia» de otros partidos por «apartar al PNV de la gobernabilidad». E Iñaki Gerenabarrena, presidente del ABB, apuntó en declaraciones a la Cadena Ser que a la hora de fijar futuros pactos para la gobernabilidad, tanto EA como EB debieran tener en cuenta no sólo cada institución de manera aislada, sino el conjunto del país.

Contra ANV y Otegi

Además, Iñigo Urkullu sigue convirtiendo a la izquierda abertzale en blanco de sus críticas más duras. Ayer, por ejemplo, dijo tener «cada vez menos ganas de contestar tantas bobadas» de Arnaldo Otegi.

Además, siguió acusando a «Batasuna o a ANV» del «juego» que han utilizado «haciendo bien las cosas en unos sitios para poder presentarse y en otros no haciéndolo para no poder presentarse». Eso, junto a la forma de aplicar la ley de partidos, ha cambiado todo el mapa.

SIN DUELO

El portavoz del EBB manifestó ayer que no cree que el actual presidente, Josu Jon Imaz, y Joseba Egibar vuelvan a enfrentarse por la presidencia del partido como hicieron hace cuatro años para sustituir a Arzalluz

condicionar

Determinados sectores del partido han entendido las palabras de Urkullu como un intento de condicionar los primeros compases de un proceso en el que la militancia jeltzale es quien debe proponer candidatos.

hace cuatro años

Josu Jon Imaz se hizo con la presidencia del EBB porque tuvo el apoyo de más compromisarios de la Asamblea Nacional. Pero, según Xabier Arzalluz, Joseba Egibar logró 5.709 votos de afiliados e Imaz 4.967.

Buen espera que las negociaciones con Galdós lleguen a buen puerto

El secretario general del PSE de Gipuzkoa, Miguel Buen, insistió ayer en que la apuesta de su partido es llegar a un acuerdo con EA para «crear una base de 23 junteros con un programa fuerte en la diputación de Gipuzkoa». Por ello, mostró su esperanza de que las negociaciones con este partido, que todavía están en una fase «muy preliminar», «lleguen a buen puerto más pronto que tarde».

El presidente regional de Gipuzkoa de EA, Iñaki Galdos, ha mostrado en los últimos días su disposición a dialogar con el PSE para concretar un futuro gobierno de la Diputación, mientras que la presidenta nacional del partido, Begoña Errazti, apuesta claramente por la conformación de coaliciones en base el tripartito del Ejecutivo de Lakua.

Preguntado al respecto, Miguel Buen respondió que «Iñaki Galdos ha conseguido mejores resultados que la señora Errazti».

Buen y Galdos coinciden en que los partidos que conformen el núcleo gobernante en la Diputación de Gipuzkoa deben estar de acuerdo en lo relativo a las grandes infraestructuras previstas para este herrialde. Por ello, muestran recelos hacia la coalición Ezker Batua-Aralar, puesto que viene oponiéndose abiertamente a estas infraestructuras. El presidente del PSE pretende convertir este punto en un elemento en contra de la apuesta por el tripartito que hace el PNV. Buen pidió ayer al candidato jeltzale, Markel Olano, que «haga una declaración pública de cuál es su posición al respecto».

Miguel Buen alabó que el candidato de EA, Iñaki Galdos, tenga además «muy claro que primero es la paz y luego todo lo demás». En este contexto llegó a afirmar «incluso en la normalización hay más coincidencias de lo que mucha gente a primera vista puede pensar».

El presidente del PSE concluyó que una fórmula de gobierno que dejara fuera a la primera fuerza en el herrialde sería considerada «una agresión gratuita» a su partido.

El PSE no sólo ha llamado a las puertas de EA en Gipuzkoa, también en Araba se plantea la posibilidad de llegar a acuerdos con este partido y con la coalición EB-Aralar. Esta formación ha declarado que no descarta a ningún partido para pactar y ha añadido que aunque apostaría por acuerdos de izquierda, no excluye al PNV y la fórmula del tripartito. GARA

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo