Maite SOROA
Pedro J. tiene candidato para el PNV
Hay ocasiones en que basta mirar al tendido para saber lo que hay que hacer. Miren quién aplaude e imaginen quién debería temblar. Lo explicaba ayer en «El Mundo» David Barbero: «las próximas elecciones de importancia no son las generales. Donde se va a decidir `la cosa' es en las internas del PNV».
Y a ese mismo respecto, en el diario digital «Izaronews» se referían a las declaraciones de Urkullu en las que el portavoz del EBB adelantaba que Imaz y Egibar no volverán a enfrentarse y señalaba: «Dicen que la secretaria del EBB, Josune Ariztondo, hará unos días que daba por seguro que Imaz y Egibar volverían a verse las caras, de perro, en la pugna por la presidencia del EBB». ¿A qué responde, pues, el aserto de Urkullu? Lo explica el editorialista de «El Mundo» en un suelto titulado «Urkullu propone a Egibar que se quede calladito». ¡Ah, era eso!
Señalaba el escriba de Pedro J. que «Iñigo Urkullu se ha ganado el sueldo de junio en apenas cuatro días». Mira tú que aplicado... No escatimaba el escribiente de la derecha nacionalista española para el portavoz de Sabin Etxea: «el portavoz del EBB ha decidido con buen criterio dar la cara para paliar con su presencia las críticas contra el PNV (...) nada mejor que hablar para restar tiempo a los críticos y para dar árnica verbal a los tuyos cuando las caras largas son la tónica dominante en los batzokis de Gipuzkoa y Alava. Es lógico que muchos se alegren del batacazo y que los acostumbrados a mandar (excepto en Alava donde ya sólo lo recuerdan los afiliados más longevos) frunzan el ceño a cada petición de análisis postelectoral». Se trata, pues, de escurrir el bulto.
Y llega ahorala alabanza para los que se han embarcado en la insólita aventura de «cautivar» a España. Según el editorialista, la notificación de que no habrá pugna interna «constituye un aviso a navegantes. La dirección nacionalista aboga por contemporizar la digestión de los malos resultados y minimizar los efectos internos de este batacazo». Y a partir de ahí: «las palabras de Urkullu refuerzan la aplicación del sentido común después de lo acontecido en Gipuzkoa. Solo Ibarretxe podría recuperar al maltrecho Egibar para dirimir un nuevo pulso con escasas opciones de éxito». Pues ya saben quién es el favorito de Pedro J. Ramírez... en el seno del PNV.
OLASO