El Parlamento de Gasteiz aprobó ayer una resolución en la que se insta a la Comisión Europea a que ordene el cierre de la pesquería de la anchoa en el Golfo de Bizkaia, «incluida la pesca científica, hasta que los informes científicos recomienden su reapertura».

Los grupos que sustentan al Gobierno de Lakua llegaron a un acuerdo con el PP para presentar una enmienda conjunta, que sacaron adelante, a una iniciativa originaria de la derecha. PSE y EHAK se abstuvieron.

La resolución aprobada insta también a la Comisión a que elabore un plan de gestión de la pesca de la anchoa, adoptando más medidas complementarias de control para mantener la viabilidad a largo plazo de las reservas, «una vez que se hayan recuperado a unos niveles seguros».

Propone al gobierno comunitario que haga cumplir a los estados miembros los acuerdos que adopte en esta materia, «imponiendo sanciones disuasorias», con independencia del «peso político que el Estado infractor tenga en la Unión».

La cámara también pide a la CE que prohíba el desembarco y venta de cualquier pescado cuando se sobrepase el TAC acordado para esa especie, «especialmente si éste es cero o se ha acordado la veda o parada biológica de dicha pesca».

En la resolución, tripartito y PP instan a Madrid que prohíba en el Estado el desembarco y comercialización.

Enmienda de EHAK

Por su parte, EHAK presentó una enmienda a la totalidad en la que pedía la prohibición de las redes pelágicas, al considerarlas «una de las principales causas de la lamentable situación actual de la anchoa y porque hasta que no se abandone esta clase de pesca nunca se podrá recuperar adecuadamente la masa biológica de la anchoa ni alcanzar una pesca sostenible». También propusieron el control riguroso de las dimensiones de las redes de cerco.