Un mural sobre Aste Nagusia imitará al friso del Partenón en el Museo de Reproducciones
La iglesia de Corazón de María, que alberga el Museo de Reproducciones de Bilbo, reabrió la semana pasada sus puertas tras cinco semanas cerrada para instalar un mejorado sistema de incendios.
GARA | BILBO
El Museo de Reproducciones Artísticas de Bilbo, que ha permanecido cerrado durante cinco semanas y media para proceder a la instalación de medidas adicionales contra incendios, reabrió de nuevo sus puertas la semana pasada y prepara una serie de actividades para atraer al público durante los próximos días.
Así, realizará diversas actividades orientadas a la familia los días 17 y 18 de agosto, entre las que destaca la elaboración de un mural que, imitando el friso del Partenón griego, represente la Semana Grande de la villa. El principal objetivo de dichas actividades es acercar a los visitantes al arte griego, que es uno de los mejor representados en las esculturas de sus salas.
Aprovechando la proximidad de las fiestas, el Museo ha optado por vincular la celebración de la Aste Nagusia con el arte griego clásico, e invita al público familiar a participar en la elaboración de un mural que recuerde al friso del Partenón, pero con la imagen del Bilbo más festivo.
Al igual que los bajorrelieves del Partenón constituían la representación del festival religioso más importante de la antigua Atenas, en el taller se tratará de elaborar un mural en el que las figuras de la mitología helénica estarán reemplazadas por los personajes típicos de Bilbo en fiestas, explica el Museo.
Nuevas intalaciones
Tras su reciente remodelación, el Museo cuenta con un moderno sistema de emergencia en caso de incendio, que se suma a las medidas contra el fuego de las que ya está dotada la antigua iglesia del Corazón de María.
La reordenación del Museo en la antigua iglesia ha permitido introducir las últimas tecnologías audiovisuales con el objetivo de optimizar la dimensión didáctica de la instalación. Proyecciones, juegos y videos interactivos de última generación se han instalado en varios emplazamientos para captar la atención del público y convertir a los visitantes en parte activa del Museo. Así, mezclando el aspecto lúdico con el educativo, además de admirar las réplicas se puede igualmente disfrutar con juegos de videoconsola adaptados al mundo de la escultura, desde los clásicos puzzles y bricks hasta el universo de Matrix con los personajes de la saga sustituidos por esculturas.
La estrella es, sin duda, el juego del «Grand Tour», en el que el usuario se pone en la piel de un hacendado europeo de la época de la Ilustración, que viaja a Italia para adquirir su colección de obras de arte.
Ubicado en pleno centro del barrio de San Francisco, el Museo de Reproducciones Artísticas fue creado hace 80 años y se considera uno de los mejores en su género por la selección y calidad de sus reproducciones. El valor de las colecciones reside en ser primeras copias en escayola de los originales. De esta manera es posible admirar reproducciones exactas del Auriga de Delfos, el Lorenzo de Médicis de Miguel Ángel, el Apolo de Belvedere o el Niño de la Espina, entre otras.
Los originales de estas obras se encuentran en los más conocidos museos europeos, como el Louvre, el Museo Británico, la Academia de Florencia o las pinacotecas y templos del Vaticano.