El 13 de noviembre de 2008 cumplirá 100 años el santo hospital civil de Basurto, ubicado en Abando. La Junta de Caridad del hospital civil compra el 25 de septiembre de 1897 los terrenos que hoy ocupa al objeto de reparar motores, chasis, conductos, estructuras y otras zarandajas de personas deterioradas y ajadas. Han sido muchos los sanitarios, que en estos 100 largos años de vida y guerra, en torno a quirófanos y enfermos han tratado de mitigar y aliviar la vida de sus pacientes. Es cierto que muchos murieron entre sus manos, pero no es menos cierto que muchos más recobraron ilusión y vida. En su lucha contra la muerte y el dolor y en su afán de insuflar vida a las gentes fue centro pionero en Bizkaia en poner en marcha la unidad antidolor allá por la década de los setenta. Para muchos bizkainos el hospital de Basurto, esta institución centenaria, añeja y de pelo blanco, evoca agradecimiento.

Estos días, acuciados por un problema familiar de enfermedad grave, hemos recurrido a su director médico, Nicolás Guerra -envuelto en polémica, acusado de retraso y desatención a una paciente- a la brava, es decir, sin previa concertación ni amistad alguna. Su atención fue exquisita y su intervención efectiva. Es muy fácil que no siempre haya estado acertado, algo que nos ocurre a todos. Pero nosotros, agradecidos, queremos manifestarle hoy nuestro eskerrik asko por su certera intervención y, al mismo tiempo, hacerle patente el recuerdo agradecido a tantos, que en el siglo de existencia, fueron en ese santo hospital civil esperanza en la noche para tantos bizkainos.