Habían apostado tanto y se las prometían tan felices que la cruda realidad se les indigesta. Me refiero a los sectores mediáticos que presentaron en su día el acuerdo de NaBai con el PSOE como el bálsamo de Fierabrás que sacaría a Nafarroa de su postración y la pondría en marcha a velocidad turbo. La realidad, sin embargo, es otra.

Ayer en «Diario de Noticias» y sus hermanos de Araba y Gipuzkoa publicaban un editorial en el que reconocían que «quienes estaban en la trama se vieron sorprendidos con los resultados electorales del 27-M en Navarra». Y a partir de la sorpresa, mostraban la herida: «Relegado el PSN a tercera fuerza, sus dirigentes hicieron como que se tomaban en serio eso de liderar un Gobierno de progreso alternativo al ya agotado que la derecha extrema venía protagonizando desde varios lustros». O sea, puro teatro.

Decía que «mintió el candidato Fernando Puras enarbolando el lema `En Navarra, tú decides', cuando desde el momento en que fue nominado exigió que no le obligasen a formar Gobierno con los nacionalistas, o le fue encomendado gestionar el plantón a NaBai e IUN, según las dos versiones que circulan por Ferraz». ¿Y quién se creyó que las navarras y los navarros iban a decidir... de la mano del PSOE?

El escribiente subía el tono: «Mintieron todos los oradores socialistas que en la campaña requirieron el voto `para cambiar el Gobierno' (...) mintió Alfonso Arroyo , más trilero que negociador, que mareó la perdiz con NaBai e IUN durante dos meses, alentando la esperanza de la mayoría de los navarros. Mintió, según Pepe Blanco, el secretario general del PSN, Carlos Chivite, conocedor también desde el 28 de mayo, o antes, de que ese cambio de Gobierno no iba a ser posible, ni para él deseable. Mintió José Blanco cuando en todas sus declaraciones hablaba de no consentir que volviera a gobernar la `derecha rancia' de UPN. ». Todo eso para reconocer, por la boca pequeña, que les han engañado como a chinos.

Y termina por alabar a su enemigo: «En esa apoteosis de la mentira figura también Zapatero, que defendió mientras pudo -con el apoyo de De la Vega y Caldera- el Gobierno de progreso con NaBai e IUN, hasta que Blanco y Rubalcaba le hicieron cambiar de idea por las repercusiones electorales que pudiera tener una ofensiva del PP (...). Pues bien, ahora Zapatero dice que él `desde siempre' había sido partidario de un Gobierno de UPN apoyado por PSN». Se les ve dolidos, ¿verdad?