La OTAN informa a Serbia de los lugares en los que lanzó bombas de racimo
GARA |
La OTAN entregó ayer a Belgrado datos sobre las zonas de Serbia bombardeadas con bombas de racimo en 1999, durante dos meses y medio de campaña aérea aliada por la crisis de Kosovo, informó ayer la agencia de noticias serbia Tanjug.
Según fuentes de la OTAN, los datos solicitados por Belgrado en febrero pasado se refieren también a Kosovo y contienen coordenadas GPS de las zonas a las que fueron lanzadas más de mil bombas de racimo.
Se considera que en unos 23 kilómetros cuadrados de territorio serbio todavía hay bombas de racimo, y los datos de la OTAN deberían ayudar a limpiar esas zonas.
Las bombas de racimo son especialmente letales, ya que al caer liberan gran cantidad de pequeñas municiones que no necesariamente explotan al impactar en el terreno sino que suponen un peligro permanente.
Kosovo, por su independencia
Los kosovares, por otra parte, ofrecerán a Serbia «relaciones de buena vecindad entre dos estados independientes«, según declaró ayer en Pristina Veton Surroi, uno de los líderes del grupo negociador a pocos días de la primera reunión directa entre kosovares y serbios sobre el futuro estatus de este territorio, que tendrá lugar este viernes en Nueva York bajo la mediación de la troika formada por los EEUU, la UE y Rusia.
«No viajamos para pedir a Belgrado permiso para nuestra independencia, sino para ofrecer relaciones de buena vecindad entre dos estados independientes», dijo Surroi.
Surroi señaló que las instituciones kosovares deben prepararse para la independencia, para no permitir que «algunos temas geopolíticos internacionales» impidan tal salida para Kosovo.
Estas palabras de Surroi se producen después de que Serbia, con el apoyo incondicional de su aliado ruso, comunicara que en Nueva York iba a ofrecer a los kosovares «una independencia en el seno de Serbia».
En este sentido, Surroi alertó de que una parte de la comunidad internacional pueda empezar a proponer un nuevo aplazamiento de la solución del estatus de ese territorio, poblado por una mayoría de albaneses que desean la independencia.
Los kosovares han anunciado la posibilidad de proclamar unilateralmente la independencia del territorio si no hay una solución antes del 10 de diciembre, fecha en la que la troika de mediadores debe presentar a la ONU un informe sobre los resultados del nuevo ciclo negociador, que se puso en marcha tras la imposibilidad de que el Consejo de Seguridad tomara una decisión sobre Kosovo.