Acusan a Rusia de mentir en el caso del teatro Dubvroka
GARA |
Cinco años después de la toma del teatro de Dubrovka en Moscú, los familiares de las 130 víctimas han denunciado ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (CEDDH) las «mentiras» de las autoridades rusas.
El 23 de octubre de 2002, un grupo armado checheno tomó el teatro. Tres días más tarde, los militares rusos lo asaltaron empleando un polémico gas para neutralizar a los militantes chechenos que exigían la retirada de las tropas rusas de Chechenia. Muchas de las víctimas murieron a consecuencia de este gas, mientras que un gran número apareció con un tiro en la cabeza. En un memorandum enviado este verano al CEDDH, Moscú se congratuló de «la ausencia de muertes debido a un retraso o una falta de cuidados médicos», y remarcó «la alta eficacia» de las ayudas.
Las familias rechazan este extremo. «Mi hijo quedó encerrado vivo en una sábana durante siete horas a una temperatura de 35 grados cuando la empleada para los muertos es de 4 grados. Si hubiera sido trasladado inmediatamente al hospital, tal vez le hubieran podido reanimar», denunció una madre en la comparecencia de ayer.
Moscú sostiene que de las 656 personas hospitalizadas, sólo 6 fallecieron. El abogado Igor Trunov subrayó que los 1.500 documentos oficiales adjuntos al memorandum remitido al Tribunal contradicen esta información ya que incluyen 71 fichas de pacientes muertos.