El Alavés vio cortada el domingo su progresión con una derrota que, tal y como reconocía ayer Martín Astudillo, supone «un paso atrás».

«Toda derrota es un paso atrás, salvo que un equipo esté metido en la parte alta y con un buen colchón de puntos», admitió el jugador argentino para el que, además, el tropiezo ante el Córdoba debe servir para volver a poner los pies en el suelo. Tres empates y dos triunfos en las cinco jornadas anteriores parecían haber dado paso a una nueva fase en la trayectoria albiazul, pero el Córdoba demostró el domingo lo que parecía haberse olvidado, que la Segunda es «muy complicada».

El choque dejó, además, consecuencias peores, como los problemas físicos de David Aganzo -que, de todos modos, se perderá la visita al Castellón tras haber visto su quinta cartulina amarilla- y Toni del Moral, con molestias en la rodilla izquierda y derecha, respectivamente. Un grupo al que también se une Alberto Morgado, que sufrió una contusión en la rodilla izquierda en el encuentro del filial alavesista frente al Portugalete.

De momento hoy descansarán, ya que el equipo no volverá al trabajo hasta mañana.

Campaña contra el hambre

La afición del Alavés, por otra parte, lidera la clasificación de la competición solidaria de «La Liga de Fútbol con la FAO contra el hambre». Con sus SMS, los aficionados contribuyen a sacar adelante un proyecto contra el hambre en el tercer mundo.