La precariedad laboral en Barakaldo aumenta y alcanza al 72% de los jóvenes
Asociaciones vecinales, sociales y sindicales iniciaron ayer en Barakaldo una campaña de denuncia de la elevada precariedad y bajos salarios que perciben, sobre todo, los jóvenes asalariados. El 72% de los jóvenes de esa localidad de Ezkerraldea tienen empleo precario.
GARA |
Asociaciones vecinales, la Asamblea de Parados, Berri-Otxoak, el Centro Asesor de la Mujer Argitan, el JOC y diferentes centrales sindicales anunciaron en Barakaldo el inicio de una campaña para denunciar el aumento de la precariedad que aumenta y afecta a los jóvenes. La iniciativa busca, según indicaron estos colectivos, luchar contra la precariedad laboral, bajo el lema «Si trabajas en precario, infórmate sobre las ayudas sociales. Es tu derecho».
Las asociaciones aseguraron que, debido «a las altas tasas de precariedad laboral» y los «abusivos precios» de la vivienda, cada vez más personas o familias tienen dificultades para «llegar a fin de mes y ver cubiertas sus necesidades más básicas».
Estos colectivos reconocieron que cada vez más asalariados con «contratos basura y sueldos de miseria» se ven obligados a solicitar diferentes prestaciones sociales para cubrir sus necesidades más básicas, como las relacionadas con la alimentación, la vivienda o la salud. Recordaron, en este sentido, que según el Observatorio de Exclusión Social «el fenómeno de los working poors o, lo que es lo mismo, pobres con trabajo, afecta ya al 65% de las personas en riesgo exclusión social», unos trabajadores que en el 72% de los casos encadena contratos temporales, de los que el 55% se prologan durante menos de tres meses. De la población analizada, según explicaron, «el 50% de los ingresos familiares se sitúa en torno a los mil euros al mes, mientras que un 25% no llega a los 900 y el 14% no alcanza los 600».
Según dijeron, en Barakaldo un total de 16.665 personas y el 72% de los jóvenes tienen un trabajo en precario, lo que supone que el 40,23% de los trabajadores está expuestos a situaciones de precariedad laboral. Además, de las 2.218 familias que perciben algún tipo de ayuda social, 776 son familias con empleos precarios y sueldos bajos que ven complementados sus ingresos con diferentes prestaciones sociales.
La campaña iniciada ayer pretende, según dijeron, «cubrir la falta de información» con que las administraciones públicas, «expertas en publicitar lo que les interesa, castigan a los ciudadanos con empleos en precario y con escasos recursos económicos para poder llevar una vida digna». Con el objetivo de ampliar la información y «denunciar situaciones de precariedad», explicarán las condiciones de acceso a las prestaciones, desde dónde solicitarlas hasta los requisitos que se exigen.
Asociaciones vecinales y sociales y centrales sindicales iniciaron ayer en la localidad vizcaina una campaña para informar sobre la elevada temporalidad y bajos salarios de los trabajadores.