La continuidad de la Feria Internacional de Fotografía Contemporánea y Vídeo de Donostia DFOTO, ha pasado a ser una incógnita después de que sus promotores, la Fundación Centro Ordóñez-Falcón, hayan renunciado a proseguir con un proyecto que el pasado mes de mayo cumplió cuatro años de vida. La «despedida» de DFOTO la anunciaron este pasado lunes en un comunicado.

Esta entidad privada, dirigida por el donostiarra Enrique Ordóñez, que junto a su mujer posee una de las mejores colecciones de fotografía de Europa, vio frustrado el pasado año su proyecto de crear en el futuro Centro Internacional de Cultura Contemporánea de San Sebastián (CICC) la sede que guardaría todos sus fondos.

Ordóñez explicó que DFOTO estaba ligada a ese espacio físico y su paralización ha llevado aparejada la de la feria, ya que aseguró que el objetivo nunca fue organizar un evento comercial sin más. Precisó asimismo, que ahora «no tiene sentido» mantener un mercado del arte sin tener una sede en el antiguo edificio de Tabacalera, donde las administraciones públicas proyectan el CICC, con la que sí esperaba contar durante los años de vigencia del contrato, ahora extinguido por decisión institucional, que le unió a este centro, que aún no ha acometido su rehabilitación y donde organizó varias exposiciones.

«Falta de apoyo»

En los cuatro años de DFOTO, Ordóñez no ocultó cierto malestar por la «falta de apoyo» institucional, especialmente del Ayuntamiento de Donostia, pero afirmó que éste no es el motivo del adiós de la feria.

El director del COFF cede «el testigo» a instituciones y entidades privadas que puedan estar interesadas en seguir sus pasos y ofrece su «experiencia, apoyo y colaboración» en el caso de que alguien tome el relevo, tarea que ve más fácil que la suya porque se trata de «un camino ya señalizado». Subrayó que no queda en él ningún poso amargo, sino la certeza del «éxito», de haber logrado «consolidar» la feria en sólo cuatro ediciones, en las que contó con el «reconocimiento» de galerías y coleccionistas internacionales. Sí admite que le habría gustado que Donostia se convirtiera en una «ciudad de la imagen», algo para lo que está convencido de que tiene un gran potencial. Ahora está volcado en el Centro de Arte Contemporáneo de Uharte (Nafarroa), aunque no olvida su aspiración de crear el Centro Ordóñez Falcón de Fotografía, para el que ya se han ofrecido algunas ciudades, españolas y europeas. Pero ese plan está «aparcado» hasta que en 2012 concluya su contrato con el centro navarro. A lo que sí ha puesto punto final es a DFOTO, pues recalca que no se trasladará a ninguna otra ciudad y que le «encantaría» que tuviese continuidad.