Batasuna advirtió ayer que «no son momentos para la división» del movimiento social contra el TAV, sino de «unirse y salir a la calle» para paralizar esta infraestructura. La formación abertzale salió así al paso de la resolución hecha pública la víspera por EB, en la que esta formación hablaba de una supuesta «campaña de sabotajes anunciada por ETA» e indicaba que «en el caso de que se cometan» no se movilizará «con quienes legitimen esas acciones».

Batasuna replicó a EB que «las supuestas amenazas a las que se refiere son totalmente indefinidas. Se trata de una informaciones sin contrastar, que provienen de fuentes políticas y mediáticas interesadas en realizar las obras a toda costa».

A su juicio, el movimiento social contra el TAV está siendo objeto de «una campaña de deslegitimación y criminalización», y agregó que «la única amenaza que hay hoy en día es que las obras ya han empezado y que los gobiernos de Madrid, Iruñea y Gasteiz no escuchan las demandas de la mayoría social».

La resolución de EB tampoco ha satisfecho al PSE, que no entiende que un socio del tripartito se oponga al proyecto, y menos cuando «ETA se ha propuesto boicotearlo».