ELA, LAB y CCOO denunciaron ayer el convenio propuesto por SEA y aceptado por UGT en el sector vinícola, «donde junto a una alta rentabilidad nos encontramos unos sueldos muy bajos». Criticaron que el preacuerdo recoge incrementos salariales «insuficientes», a la vez que deja de lado la reducción de jornada y que mantiene bloqueada la negociación, al no contar con el respaldo de la mayoría sindical.

Respecto a la situación del sector vinícola, denunciaron que de cada cien euros que se ingresan en las bodegas, 20,5 van directamente a las empresas como beneficios netos, mientras se emplean 11 en gastos de personal, según un estudio realizado sobre 28 bodegas en Rioja Alavesa

Recordaron los millones que se invierten en imagen, publicidad o en la contratación de grandes arquitectos de estas bodegas mientras los sueldos anuales de los trabajadores que emplean «van desde los 13.300 euros del peón hasta los 15.600 euros del oficial de primera».

Negociación

Explicaron que, en este contexto, SEA ha mantenido «una actitud prepotente y bloqueadora» al anteponer la exigencia de que los sindicatos renunciaran a la reducción de jornada.

Las centrales aparcaron sus exigencias a la vez que reclamaron mayores incrementos salariales y otras mejoras, pero la patronal presentó una propuesta «insuficiente», a juicio de los sindicatos. El contenido de este preacuerdo contempla mantener invariable la jornada anual de 1.743 horas de trabajo durante los dos años de vigencia del convenio, aplicando unos incrementos salariales del IPC de los años 2007 y 2008, incrementados en 1,70 y 1,65 puntos respectivamente.

Sólo UGT expresó su conformidad con un texto que, en opinión del resto de centrales, «impide en estos momentos mejorar los contenidos de la negociación», mientras SEA señala que no se convertirá en acuerdo si no lo firma la mayoría de la representación sindical. ELA, LAB y CCOO dijeron no entender la postura de UGT al firmar, rompiendo al unidad sindical, un preacuerdo sin eficacia alguna «a no ser que tenga que ver con otros intereses que no tienen nada que ver con los de quienes trabajan en el sector».

Los sindicatos insistieron en que la propuesta empresarial «sigue siendo insuficiente, ya que gira en torno a incrementos muy similares a los de otros convenios anteriormente pactados, mientras que desaparece la reducción de jornada». Por ello, lo calificaron de «retroceso y empeoramiento de las condiciones de los trabajadores en un sector donde los beneficios empresariales van aumentando año a año».

Por todo ello, anunciaron la convocatoria de una movilización frente a la sede de SEA, para exigir a la patronal que retome la negociación y busque una salida digna al convenio. A su vez, realizaron un llamamiento a UGT para que retome la unidad sindical y se sume a las reivindicaciones planteadas.