Parecía que la marcha de Dimitry Piterman había acabado con los males del Alavés, al menos con los institucionales, pero el último capítulo de esta larga historia parece, lamentablemente, no estar escrito.

Los acontecimientos de los últimos días así lo apuntan. Empezando por el informe presentado en el Juzgado Mercantil de Gasteiz por los tres administradores concursales al Alavés, en el que se revelan las graves irregularidades presuntamente cometidas por Piterman, que podrían saldarse con una deuda de casi 28 millones de euros.

La constatación de esta dura realidad puede obtener una doble respuesta por parte de Fernando Ortiz de Zarate, actual accionista mayoritario del club, con 51% de las acciones. El empresario alavés se querellará, por un lado, contra su predecesor, al considerarle responsable de numerosos desmanes económicos. Pero, a tenor de lo que declaró ayer el propio Ortiz de Zarate, también podría desembocar en su propia salida del club albiazul.

El empresario ve muy complicado sacar adelante la nave alavesista con semejante agujero, algo para lo que considera imprescindible la ayuda exterior, empezando por las instituciones. Si no llega, podría deshacerse de sus acciones, según adelantó ayer. «Si no tenemos ayudas institucionales, esto se complica mucho -reconoció-. Nosotros hemos venido a sacar este club adelante, arriesgando el patrimonio familiar y echándonos la manta a la cabeza, pero si al final no tenemos ayudas institucionales y no hay un apoyo, poco más podemos hacer nosotros aquí, todo este esfuerzo podría quedar baldío». Por eso, Ortiz de Zarate avanza la posibilidad de «plantearnos irnos de aquí porque nuestro trabajo empezó en julio intentando sacar adelante y te encuentras ahora que la deuda anterior la vamos a tener que soportar nosotros sin ayudas claras. Al final, igual tenemos que decir hasta aquí hemos llegado y nos tenemos que ir».

Vuelve Aganzo

A la espera de lo que suceda en el plano institucional, la plantilla del Alavés sigue preparando el encuentro frente al Albacete. Una cita en la que, en principio, la única novedad en el once albiazul pasará por el regreso de David Aganzo, en detrimento de Raúl Sánchez.

Josu Uribe seguirá sin poder contar con los lesionados Miguel Pérez y Asier Arranz, aunque sí estará a su disposición Medhi Lacen, ya recuperado.