GARA > Idatzia > Futbola

Cinco sensaciones distintas para una ausencia conjunta (I)

Desde la Eurocopa de 1984 celebrada en el Estado francés, ningún torneo había arrancado sin alguno de los equipos de las islas. En Austria y Suiza se repetirá esta circunstancia. Por ello, GARA se ha querido acercar a la realidad de cada uno de los cinco combinados de las islas.

Beñat ZARRABEITIA

El gol de Mladen Petric en Wembley ha movido con fuerza los cimientos del fútbol inglés. Los pross se han quedado fuera de la Eurocopa, un hecho que ha acarreado un terremoto de dimensiones incalculables en un país donde el fútbol es más que un deporte. La eliminación ha sumergido a un país que gira en torno al football, a jugadores y aficionados, en una depresión sin precedentes en las últimas tres décadas. Han elegido a Fabio Capello para remontar el vuelo.

El batacazo ante Croacia, siendo derrotados por 2 a 3 en Londres cuando un punto clasificaba a los ingleses, precipitó el cese fulminante de Steve McLaren al frente de la selección inglesa. El fracaso, comparable a la no clasificación para los mundiales del 74 y 94, provocó una retahíla de críticas que no dejó títere con cabeza: desde el técnico al portero del oscuro día ante los dálmatas, Scott Carson, pasando por los Beckham, Owen o Sol Campbell, prácticamente nadie se ha librado de los dardos envenenados de la mordaz prensa inglesa. Para que el cocktail fuese completo, un tabloide publicó las imágenes -con vídeo incluido- de la fiesta de cumpleaños de Shaun Wright-Phillips celebrada poco tiempo antes del partido ante los croatas. En las mismas se observa como el capitán del equipo, el lesionado John Terry, esfuerza su pierna con una bailarina. Asimismo, se da cuenta de que el central, presuntamente, acabó vomitando y orinando en una juerga en la que también participaron Wright-Phillips, Lampard o Joe Cole.

Mourinho, el deseado; Capello, el elegido

Ante semejante panorama, los ingleses necesitan recuperar la ilusión. Nada más y nada menos. Para ello, la Federación Inglesa (FA), los jugadores -Terry lo ha calificado de «ideal»- y los hinchas tenían un claro objeto de deseo, que no era otro que José Mourinho se conviertiera en el mánager del equipo de los three lions. Según algunas informaciones, la oferta al técnico luso habría ascendido hasta los 9 millones de libras, pero el genial míster portugués declinó la propuesta.

Del deseo se ha pasado a la necesidad y la FA anunciará hoy el fichaje de Fabio Capello. De hecho, la junta directiva de la federaciín inglesa aprobó ayer el nombramiento del italiano como nuevo seleccionador, «sujeto a la exitosa conclusión de las negociaciones contractuales». El ex del Real Madrid y Milan ha seducido a la Federación y volvió a Italia convencido de que su fichaje se anunciará hoy. La propia FA advirtió desde el primer momento de que la nacionalidad no iba a ser determinante. Así, además de Mourinho o Capello, los nombres de Lippi, Klinsmann o Scolari saltaron a los medios de comunicación y a las tradicionales casas de apuestas. En las mismas, también figuraban los ingleses Harry Redknapp -recientemente detenido por corrupción- o Steve Coppel, pero también el irlandés Martín O'Neill y el galés Mark Hughes.

¿Y a nivel futbolístico qué? Esa es la otra gran pregunta a la que se enfrentan los pross. Hasta conocer el nombre del seleccionador no se verán los cambios en el equipo, ni se sabrá si las vacas sagradas como Beckham, Owen, Heskey o Campbell dejan el equipo, si se aparca por fin la incompatible alineación conjunta de Lampard y Gerrard o si se da paso a jóvenes como Huddlestone, Agbonlahor o James Milner. Mientras tanto, el debate sobre la delimitación del número de extranjeros que juegan en la Premier, con el Arsenal que apenas alinea ningún inglés de titular como líder, está en boca de todos. De hecho, Steven Gerrard ya ha abogado por una reducción de los foráneos y ha afirmado que es «un lujo» que el equipo de Wenger juegue sin jugadores nativos.

En medio de esa vorágine y sea quien sea el técnico, la pesadilla inglesa no acabará hasta verse en el Mundial de Sudáfrica en 2010. En el camino, volverán a cruzarse con sus últimos verdugos: su particular pesadilla dálmata.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo