GARA > Idatzia > Ikusmira

El «caso Societé Générale» pone en evidencia la opacidad de los gigantes de la banca

El segundo banco en importancia del Estado francés está inmerso en un escándalo que arroja cada día nuevos y más preocupantes datos sobre el grado de opacidad con que se conducen las altas finanzas. La entidad gestora de la Bolsa parisina ha abierto investigación a raíz de la venta de acciones por un destacado directivo de dicha entidad a unos días de que se destapara el supuesto fraude atribuido a uno de sus broker.

La actuación de Robert Day, que el banco desvincula de cualquier canje de información privilegiada, ha venido a enturbiar más las cosas, tras las declaraciones del bróker al que se achaca el «evaporar» nada menos que 4.900 millones de euros en operaciones de riesgo emprendidas fuera del control del banco. Jérme Kerviel ha venido a poner voz a la pregunta que se hace la mayoría de los clientes del banco. ¿Cómo es posible que por muy crack que sea, por mucho sueldo millonario que perciba, un empleado pueda contar con ese margen de libertad para mover efectivos sin que salte ninguna luz roja? Kerviel afirma que esas luces sólo saltan cuando fallan las operaciones de dudosa legalidad en que los broker como él se desenvuelven.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo