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CRÓNICA | Consecuencias de la ley de partidos

El Parlamento de Gasteiz seguirá callando otra semana

Ni la evidencia de que el grupo parlamentario Ezker Abertzalea ha sido espiado, ni la amenaza que se cierne sobre él, ni siquiera la condena contra el anterior presidente de la Cámara han sido motivo suficiente para que el Parlamento o alguno de sus órganos haya reaccionado oficialmente.

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Iñaki IRIONDO

En las últimas semanas las consecuencias de la Ley de Partidos están golpeando con fuerza al Parlamento de Gasteiz, pero esta institución sigue sin decir nada al respecto. Han pasado dos juntas de portavoces, una reunión de la Mesa y un Pleno, y se mantiene el silencio.

En la anterior reunión de la Junta de Portavoces, la pasada semana, la representante de Ezker Abertzalea presentó una propuesta de declaración institucional, denunciando la Ley de Partidos, por estar en el origen tanto de la condena contra miembros de la Mesa de la Cámara como de los ataques contra su grupo parlamentario. Además, solicitaba que el Gobierno español retirara su demanda de ilegalización.

Ayer, en el mismo órgano, Nekane Erauskin pidió que si no había habido pronunciamientos contrarios se diera lectura a la declaración institucional. PP y PSE se opusieron. Ante este posicionamiento, que impedía el pronunciamiento del Parlamento, la portavoz de Ezker Abertzalea solicitó que se asumiera como Declaración de la Presidencia, fórmula que ya se ha utilizado en otras ocasiones cuando no había unanimidad sobre un texto. La presidenta, Izaskun Bilbao, no aceptó la propuesta. El portavoz del grupo parlamentario del PNV, Joseba Egibar, explicó después que la Presidencia ha realizado este tipo de declaraciones cuando no todos los grupos estaban de acuerdo con el escrito, pero ninguno se oponía a que fuera leído por la presidenta.

Egibar añadió que propusieron a Ezker Abertzalea una comparecencia conjunta de todos los portavoces que están contra la ilegalización, lo que este grupo rechazó. Según explicaron después, la negativa se debió a que considera necesaria una declaración de la institución ante una causa que le afecta directamente y no un sucedáneo.

En rueda de prensa, Erauskin manifestó que habían mantenido reuniones en los últimos días con el resto de los grupos parlamentarios -excepto el PP- a los que explicaron su situación, lo que incluye el espionaje de sus conversaciones telefónicas. La portavoz independentista dejó en manos de esos grupos dar a conocer cuál será su actuación al respecto.

Tensa cita con Ibarretxe

Nekane Erauskin informó también de que el jueves había mantenido un contacto con la presidenta de la Cámara y criticó con dureza que habiendo pedido una cita al lehendakari, Juan José Ibarretxe, éste no les hubiera respondido. Aclaró que, a la vista de este silencio, ya «no esperamos nada de él».

Apenas quince minutos después de hacer pública esta denuncia, Ibarretxe, que se encontraba en el Parlamento, citó a una representación de Ezker Abertzalea a las oficinas que tiene Lehendakaritza en el edificio del Legislativo.

Fuentes independentistas calificaron la reunión como «muy tensa», con intercambio de reproches. Desde Ezker Abertzalea señalaron que ni en la reunión del jueves con la presidenta del Parlamento, ni en la de ayer con el lehendakari, consiguieron que ninguno de los dos tomara alguna iniciativa.

En la rueda de prensa ofrecida por Ezker Abertzalea, Nekane Erauskin denunció también las últimas declaraciones de Juan María Atutxa, proponiendo al Tribunal Supremo que retirara la condición de parlamentarios a los integrantes de los grupos suspendidos, y las de los presidentes del EBB y del BBB, Iñigo Urkullu y Andoni Ortuzar, respectivamente, culpando a la propia izquierda abertzale de las medidas ilegalizadoras. Erauskin señaló que este tipo de declaraciones legitiman la utilización de la Ley de Partidos.

Egibar: «Toca reaccionar»

Pasado el mediodía, el portavoz del grupo jeltzale, Joseba Egibar, convocó a los medios de comunicación para transmitir la posición contraria del PNV a las ilegalizaciones y «denunciar sin paliativos» la «violación del fuero parlamentario» que había sufrido Ezker Abertzalea al ser intervenidas sus comunicaciones telefónicas. Al mismo tiempo, Egibar se refirió a la condena del Supremo contra tres miembros de la anterior Mesa para decir que «ni admitimos ni vamos a admitir lo que calificamos de intrusión del Poder Judicial en la vida y la capacidad autoorganizativa de este Parlamento».

El portavoz jeltzale llamó al conjunto de la sociedad a «reaccionar desde la serenidad y con contundencia democrática» contra esta «poda de derechos y libertades», sin caer en la posición acomodaticia de pensar que «son cosas que no me afectan a mí ni a mi grupo, porque nos afectan a todos».

También el presidente de EA y portavoz parlamentario, Unai Ziarreta, hizo pública una nota en contra de la «gravísima vulneración de derechos y libertades» que suponen las ilegalizaciones, la sentencia contra la Mesa y el procesamiento del lehendakari. Aseguraba además que la última decisión del Supremo sobre las ilegalizaciones era «un paripé» porque la decisión está ya tomada.

En cuanto a un pronunciamiento del Parlamento en sí, habrá que esperar al próximo viernes, cuando se debate una propuesta de Ezker Abertzalea contra las ilegalizaciones.

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