GARA > Idatzia > Zinema

El anillo de compromiso hallado entre restos bélicos

«Cerrando el círculo»

El veterano Richard Attenborough quiere culminar su carrera como director con un intenso melodrama que se titula muy significativamente «Cerrando el círculo». Con un magnífico reparto repleto de nombres ilustres que encabezan Shirley MacLaine y Christopher Plummer, define a la generación de la segunda guerra, caracterizada por su espíritu de sacrificio y la ocultación de los sentimientos. Pero el pasado siempre vuelve y remueve las viejas pasiones.

p060_f01_199x111.jpg

Mikel INSAUSTI | DONOSTIA

Richard Attenborough tiene 84 años y lleva dirigiendo cuarenta, en los que ha hecho doce largometrajes. Esta decimosegunda película quiere poner un brillante colofón a su carrera, por eso maneja un tema que le va mejor a sus características que la anterior «Búho Gris», una película de aventuras con unos resultados del color del propio título. Con «Cerrando el círculo» parece hacer una declaración de intenciones, porque vuelve sobre los fantasmas de la II Guerra Mundial que marcaron a su generación. El joven Richard sirvió como cameraman en la contienda, así que no podría sentirse más identificado con lo que cuenta. Pero no se trata de una drama bélico como «Un puente lejano», que no pasaba de ser una de esas grandes producciones de interminable reparto internacional y duración excesiva. Se acerca más al romanticismo de «Tierras de penumbra», aunque esta vez no maneja la excusa biográfica que tanto le gusta a Sir Richard. Esa mezcla de historia de amor y trasfondo bélico ya la probó con «En el amor y en la guerra», sólo que dentro del contexto de la Gran Guerra y en torno a la figura de Ernest Hemingway.

Es fácil de entender la emoción que tuvo que suponer para el octogenario Attenborough dar con el guión de «Cerrando el círculo», ya que ese tipo de argumentos trascendentes suelen salir por lo general de las obligadas adaptaciones literarias. Sin embargo, esta vez se trataba de un libreto original, para el que Peter Woodward se inspiró en una noticia sobre el hallazgo de un anillo de compromiso entre los restos de unos aviones de la II Guerra Mundial, cerca de Belfast. Pensando en la manera en que hay hallazgos tardíos que remueven el pasado, se puso a imaginar una de las tantas historias que vivieron los centenares de miles de soldados norteamericanos enviados a bases irlandesas durante la guerra y que no distaba mucho de las que le contaba su padre, el actor Edward Woodward. Peter también se ha venido dedicando a la interpretación, haciéndose muy popular gracias a su papel de Galen en la serie de ciencia-ficción «Babylon 5». Es ahora cuando, al igual que hiciera Richard Attenborough en su momento, empieza a ampliar su dedicación cinematográfica a otras facetas como la de guionista. Es el encargado de escribir el nuevo thriller fantástico de David Slade, una de las promesas del cine inglés que con «Unthinkable» quiere demostrar que el impacto de «Hard Candy» no fue casualidad.

Lujoso reparto

La larga trayectoria profesional de Richard Attenborough durante siete décadas como actor le permite disfrutar de unas relaciones al alcance de muy pocos, por lo que no suele tener ningún problema a la hora de completar lujosos repartos estelares, más aún a propósito de una historia que reclamaba la participación de ilustres veteranos. No le ha costado mucho convencer a Shirley MacLaine, con la que guarda una fuerte amistad desde que trabajaron juntos en «Los pecados de la Señora Blossom», una película de 1968.

Para formar pareja con una actriz de tanto prestigio hacía falta alguien muy curtido, siendo el elegido Christopher Plummer, que se encuentra en la cúspide de su carrera, por ser de esos intérpretes que mejoran con la experiencia, además de contar de la suerte de ser mimado por las buenas producciones del cine canadiense. El resto de veteranos los aporta el cine inglés, ya que Brenda Fricker y Peter Postlethwaite dan empaque a cualquier cartel que se precie.

Teniendo entre manos un guión original lleno de posibilidades y un reparto sin fisuras, Richard Attenborough no ha necesitado arriesgar en la realización, decantándose por el melodrama de factura clásica, apoyado en su equipo técnico habitual con el director de fotografía Roger Pratt al frente. La circunstancia de que «Cerrando el círculo» sea un relato que conecta el presente con el pasado permite el estilo retrospectivo, sin que nadie le pueda acusar de trasnochado. Además, la casualidad ha querido que el objeto simbólico que entrelaza los destinos de los protagonistas sea un anillo, claro que en una acepción bien distinta a la del imaginario de Tolkien. En este caso, el concepto del compromiso significa también atadura, porque representa viejas promesas de amor que atan de por vida a quienes las hacen en su juventud. La generación de la guerra creyó en la fidelidad, llevada hasta extremos de auténtico sacrificio personal, ocultando los sentimientos hasta convertirlos en secretos de familia.

El director Richard Attenborough afirma que la clave del éxito es «sacar lo mejor de los actores»

En la rueda de prensa celebrada ayer en Barcelona, el reputado director de cine británico, que presentaba su última realización, «Cerrando el circulo», aseguró que la clave del éxito de una buena película es conseguir crear las circunstancias idóneas para que los actores y actrices se convenzan «de que son los mejores» y «den el mejor espectáculo posible».

En la promoción de la cinta, Attenborough estuvo acompañado de Misha Barton, la joven protagonista de la misma, que narra una historia de amor a varias bandas que se desarrolla desde el estallido de la Segunda Guerra Mundial hasta la actualidad.

El célebre realizador de cintas como «Ghandi», por la que obtuvo el Oscar al mejor director en 1983, «Chaplin» o «Grita Libertad», admitió en conferencia de prensa que siempre invierte todos sus esfuerzos en llevar a cabo una buena dirección de actores, consciente de que de ellos depende en gran parte que una película sea creíble y conmueva al público; y volvió a remarcar: «creo que el director tiene una responsabilidad básica que es crear las circunstancias para que los actores den el mejor espectáculo que puedan, para que hagan una actuación realmente intensa y fiel».

Precisamente, eso es lo que asegura haber conseguido de la protagonista de «Cerrando el círculo», Misha Barton, a quien alabó al advertir que «se convertirá en una de las mejores actrices de su tiempo».

Tras calificarla de «actriz suprema», resaltó que «Misha tiene la capacidad de sentir realmente lo que expresa su personaje y llorar de verdad si hay que llorar».

Misha Barton, joven actriz que saltó a la fama por su papel en la serie de éxito «O.C.», explicó que inició su trayectoria profesional en el teatro para luego pasar a hacer televisión, medio que le ha permitido dar el salto al cine al tiempo que le garantizaba una estabilidad económica.

Sobre este último medio, el cine, afirmó que «es y ha sido siempre mi pasión. Hice mi primera película con once años y ahora he recibido un gran regalo, como es trabajar para Richard Attenborough».

La actriz, que en un año ha trabajado en cuatro proyectos cinematográficos distintos, explicó que eligió el papel que le ofreció Richard Attenborough en «Cerrando el círculo», que se estrena hoy en salas, «para poder trabajar con el propio director y con Shirley Maclaine». GARA

Estreno

Título original:

«Closing the Ring».

Dirección: Richard Attenborough.

Guión: Peter Woodward.

Producción: Richard Attenborough y Jo Gilbert.

Fotografía: Roger Pratt.

Música: Jeff Danna.

Intérpretes: Shriley MacLaine, Christopher Plummer, Neve Campbell, Brenda Fricker, Peter Postlethwaite, Mischa Barton, Martin McCann, Gregory Smith, David Alpay, Stephen Amell.

Duración: 118 minutos.

País: EE.UU., 2007.

Género: Melodrama.

ROMANTICISMO

En 1941, en Michigan, Ethel Ann Roberts roba el corazón de tres amigos, Teddy, Jack y Chuck, todos jóvenes aviadores. Pero Ethel sólo tiene ojos para Teddy, con quien se casa en secreto. Éste parte a la guerra con un anillo y una promesa de amor eterno, pero muere en Belfast. La vida lleva a Ethel a enterrar su amor y a casarse con Chuck, pero el hallazgo del anillo hace que se cierre el círculo.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo